El presidente Enrique Peña Nieto aseguró que vio que Donald Trump tenía posibilidades de ganar la elección en Estados Unidos y decidió invitarlo a México como candidato porque los mercados estaban reaccionando a sus afirmaciones y pensaban que podría haber un problema económico, por lo que el peso estaba devaluándose.
En entrevista para El asalto a la razón, el mandatario dijo que su encuentro con Trump como candidato, en Los Pinos, sirvió para abrir una puerta de entendimiento sobre la relevancia de la relación entre ambos países y redefinir el Tratado de Libre Comercio, hasta llegar al acuerdo de esta semana, en el cual tanto México como Estados Unidos “ganan”.
Aquí la transcripción de la primera parte de la entrevista:
Carlos Marín (CM): Presidente Enrique Peña Nieto, buenas noches.
Enrique Peña Nieto (EPN): Carlos, me da mucho gusto saludarte y tener la oportunidad de tener esta entrevista.
CM: Espero que de veras le dé gusto, porque la última que vez platicamos...
EPN: ¿Fue algo desagradable el encuentro?
CM: No, para mí no.
EPN: Tampoco lo fue para mí.
CM: Fue en Anchorage, Alaska.
EPN: Y hubo todo tipo de comentarios, como en todo, a favor y en contra.
CM: Creo que usted y a mí nos tundieron.
EPN: Más a ti.
CM: Sí, dijeron que fui un irrespetuoso.
EPN: Irreverente.
CM: Me decían una obviedad, que no somos iguales, y desde luego que no. Por fortuna yo no he tenido la responsabilidad...
EPN: Pero recuérdales (a los televidentes) qué fue lo que pasó, dales contexto del tema. Tú y yo si nos acordamos, pero el resto de la gente yo creo que no.
CM: Lo que pasó es que yo estaba verdaderamente sorprendido, diría indignado, y le hice un planteamiento muy temerario. Dije que le iba a exponer a usted los Sentimientos de la Nación, por mi contrariedad en virtud de que, como candidato, Donald Trump vino a Los Pinos y en conferencia de prensa cometió la canallada de volver a hablar del muro. Y entonces con usted quise hacer una entrevista, que se volvió más bien una discusión. Le agradezco que me lo haya permitido y que esté yo vivo.
EPN: No digas eso, Carlos. Si ha habido un gobierno respetuoso de la crítica y de la libertad de expresión ha sido este y tú eres un fiel testimonio de que así ha sido.
CM: Bueno, coincido con usted. El asunto es que mi contrariedad fue porque usted no corrió a Donald Trump de Los Pinos al cometer él la canallada de hablar del muro en la conferencia de prensa. Debo reconocer que usted tuvo razón. Si lo hubiera corrido, ¿cómo estaríamos los mexicanos? Eso fue hace dos años.
EPN: Exactamente, hace casi dos años.
CM: Y apenas ayer se llegó a un acuerdo positivo entre los gobiernos de Estados Unidos y México. Y con México, además, con el gusto o la complacencia, más bien la participación del representante del futuro gobierno. Entonces comencé con una especie de autocrítica, no me disculpo con usted. Me explico…
EPN: Te cuesta mucho trabajo reconocer tu error.
CM: Realmente estaba yo indignado. Y sabe que esa visita le costó mucho en su popularidad.
EPN: Sí, pero no he gobernado para la popularidad, Carlos. He gobernado para darles resultados a los mexicanos.
CM: Y eso me dijo…
EPN: Te lo dije entonces, te lo vuelvo a decir ahora. Y déjame entonces regresarme a lo que pasó, porque hay alguna imprecisión: cuando (Trump) estuvo en Los Pinos no abordamos el tema del muro, fue después, ya en su trayecto de regreso a Estados Unidos, donde hay un tuit de él, que obviamente genera toda una confusión. Pero esto no difiere mucho, efectivamente, de lo que había en el sentimiento de los mexicanos ante la visita de quien entonces era candidato, a quien las encuestas lo ponían en posibilidad de llegar a la Presidencia y que a la postre resultó siendo el Presidente de Estados Unidos. Y yo te diría, mira, no hay que tomar decisiones con la víscera ni con el estómago, había que tomar decisiones con la razón. ¿Qué motivó ese encuentro? Y ya reconocí yo que a lo mejor fue apresurado...
CM: Es que le voy a hacer una fe de erratas a su fe de erratas. Algo le está complicando la memoria cuando dice que fue un tuit sobre el muro de Donald Trump. No. En Los Pinos, en conferencia de prensa, él aludió en dos ocasiones al muro. En ese momento yo dije: “En este momento Peña lo va a correr”.
EPN: Vuélvela a buscar, en la imagen, y dice: “No abordamos el tema”.
CM: Sé que no lo abordaron como tema en su conversación, pero él dijo la palabra muro dos veces...
EPN: Yo te digo, no lo abordamos, no hablamos del tema…
CM: Usted y él. Hablo de la conferencia de prensa.
EPN: Sí. Lo bueno es que hay memoria histórica. Si lo buscas él dice: “No abordamos el tema”.
CM: Bueno, pero el asunto es que usted lo invitó y le llovió por haberlo invitado.
EPN: Es correcto.
CM: Después alguien de su confianza me dijo algo que quiero que usted me diga si es cierto o falso. Que usted tuvo la seguridad, desde que vio como candidato a Donald Trump, que era el mejor aspirante y que iba a ganar las elecciones. ¿Es cierto?
EPN: A ver: yo no sabía que iba a ganar las elecciones, no soy adivino, pero sí veía una enorme posibilidad. ¿Por qué?, porque, y a México le pasa un poco esto y al mundo entero, a los países democráticos, creo que hay un ambiente antisistémico que ha llevado a que realmente quienes han mantenido una posición muy radical, extrema incluso, sobre las decisiones de algunos gobiernos hayan arribado al poder, y no me refiero al caso de México. Los partidos políticos tradicionales han enfrentado un enorme desgaste y creo que es consecuencia de un clima muy antisistémico, de un amplio rechazo que hay entre distintos sectores de la sociedad, por los partidos convencionales o por las figuras políticas convencionales.
CM: En el mundo.
EPN: En el mundo. Y bueno, al final de cuentas lo que advertía yo entonces es que había una posibilidad real de que el entonces candidato Trump llegara a ser Presidente, pero eso no fue lo que motivó realmente el encuentro. Lo que motiva es que ya los postulados que venía haciendo durante su campaña estaban impactando la economía de nuestro país; nuestra moneda se estaba devaluando porque los mercados, como siempre, descuentan de manera anticipada, advertían que si ganaba y hacía lo que entonces postulaba, era altamente probable que México sí tuviera un problema económico, lo estaban descontando.
CM: Y ya hablaba contra el TLC.
EPN: Y hablaba ya contra el TLC. Entonces para mí era importante poder tener un encuentro con quien era candidato para poder darle la óptica de este gobierno sobre el contexto de la relación México-Estados Unidos. Fue un encuentro yo creo que apresurado, que no consideró entonces, como a ti te pasó, el enojo que había entre la sociedad mexicana.
CM: No, pero yo no tuve problema con que lo invitara, tuve problema con que no lo hubiera corrido.
EPN: Y no lo hubiese hecho Carlos, porque el Presidente, como jefe de Estado, tiene que conducirse con la total diplomacia, aun en el marco de totales y absolutas diferencias. Y yo no iba a poner en riesgo, en razón de un enojo, incluso personal, lo que le pudiera deparar a este país, había que actuar con absoluta razón.
“Y si bien ese encuentro fue costoso en lo político, en la popularidad y en todo lo que tú has referido, no dejó incluso el resultado esperado en ese momento inmediato, a la postre sí dejó algo muy positivo: una puerta abierta, una puerta de entendimiento, porque ahí fue el primer encuentro de dos presidentes, de dos equipos de colaboradores que podían dialogar, platicar y que permitió que una vez que él llegó a ser Presidente pudiéramos tener acercamiento y poder ir matizando, por lo menos ponerle acento a que la relación es tan relevante para México como para Estados Unidos.
“Y eso permitió que se sentaran a la mesa, que determinaran redefinir un acuerdo de libre comercio, que tomara meses todo este proceso largo, extenso y arduo, por posiciones muy duras que tenía el gobierno de Estados Unidos, como dura fue la posición de México en defender aquello que fuera para el bien del país. La verdad es que fue un encuentro en el que a final de cuentas definimos: “Tenemos que encontrarlo en lo que todos ganemos”.
CM: ¿Ya México, digamos, se arregló y ya no le importa a usted lo que pase con Canadá?
EPN: No, Carlos, mira, sin duda era muy importante el arreglo con Estados Unidos, que tenía una posición mucho más dura con los otros dos socios, tanto con México como con Canadá; ahora ellos están en la parte de poder solventar o llegar a un arreglo sobre los temas particulares de esa relación Estados Unidos-Canadá.
“La que tenía con México se logró arreglar; creo que es un acuerdo positivo en el que los dos países ganamos, en el que preservamos condiciones favorables para el país y también gana Estados Unidos, creo que los dos ganamos. Este fue un acuerdo auténticamente frente a lo que era una posibilidad de que dejara de haberlo y eso realmente hubiese significado para la economía mexicana un enorme retroceso. ¿Sabes el nivel de comercio que hacemos con Estados Unidos? Teniendo estos dos socios, casi 97 por ciento del comercio lo hacemos con Estados Unidos, poco más de 96.6 por ciento; 3.4 por ciento es el comercio que hay con Canadá. Es el tamaño de los dos socios.
“Creo que lo que ayer ocurrió fue un paso bien positivo para México, se despejaron las dudas que había y la incertidumbre sobre si iba a haber o no acuerdo comercial entre México y Estados Unidos.
CM: ¿A usted le pudo la manera como Donald Trump, con los emisarios mexicanos, hace esta llamada telefónica a usted?, porque se llegó a decir: “No se ve Peña”. Bueno, yo lo escuché y era una llamada, a mi me pareció lógica, pero ¿A usted le pudo?
EPN: Pues yo no sé qué esperaban. La forma no me importó tanto, a mí lo que me importa es el resultado. ¿Qué es lo importante en algo: cómo lo hagas o el objetivo que alcances? Aquí creo que se logró hacer un anuncio bien importante: dos presidentes, uno vía telefónica, como estaba ocurriendo. No sé cómo esperaban que fuera, a lo mejor una transmisión en vivo los dos en el mismo momento, pero, bueno, como haya sido.
CM: Total que usted no está trabajando para el programa complacencias.
EPN: Es correcto. Estoy trabajando para darle resultados a México y lo de ayer es algo bien positivo.
SATISFECHO DE HABER CONCRETADO LAS 14 REFORMAS ESTRUCTURALES
El presidente Enrique Peña Nieto encabezó la conmemoración del 140 aniversario de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco) de Ciudad de México, donde entregó la medalla al mérito empresarial a Tito Briz Garizurieta, director general de restaurantes El Cardenal; al rector de la Universidad Justo Sierra, José Reyes, y al presidente vitalicio de Grupo Empresarial Kaluz, Antonio Del Valle.
Afirmó que a los ciudadanos les toca calificar su gestión, pero se dijo satisfecho de haber concretado las 14 reformas estructurales que fueron parte del Pacto por México.
También se refirió a proyectos transexenales, como el Nuevo Aeropuerto Internacional de México, el cual, aseguró, facilitará la vida a los habitantes de la capital del país y atraerá mayor turismo, así como a obras para agilizar el acceso a la metrópoli y mejorar sus servicios, como los túneles emisores oriente y poniente.
El mandatario destacó además la contribución del gobierno federal con recursos públicos para promover y realizar eventos que atraen a más de 180 mil visitantes al año, como la Fórmula 1, los partidos de la NFL y el torneo de golf de la PGA.
Le vi más posibilidad a Trump y eso dejó una puerta abierta: Peña
ENTREVISTA
Asegura que el encuentro de hace dos años en Los Pinos sirvió para abonar al entendimiento sobre la relevancia de la relación México-EU y redefinir el TLCAN hasta llegar al acuerdo del lunes.
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