El 24 de junio, día de "San Juan Bautista", inició en Hidalgo la siembra de la flor de cempoalxóchitl, proviene del náhuatl, flor de 20 pétalos, o también conocida como "flor de muerto" o cempasúchil.
De acuerdo a la tradición, anteriormente los señores de la casa acudían a las milpas a regar la semilla de la flor, la que se quitó de los altares el año anterior, para sembrar y qué los últimos días de octubre esté lista para su cosecha y nuevamente ser utilizada en los altares en la celebración del "Día de Muertos".
Además, a decir de los pobladores, el día de "San Juan Bautista" marca el inicio del periodo de lluvias y con ello de la siembra, no solo de la semilla de cempoalxóchitl sino de cualquier tipo.
Y posteriormente el 29 de junio se adquieren animales como puercos, guajolotes, pollos que habrán de criarse, engordar y ser utilizados para los tamales y de esta manera poder ofrendar a los fieles difuntos a finales de octubre.
La flor de cempoalxóchitl es una especie de planta que se distingue por el color anaranjado o amarillo, es muy peculiar y es uno de los elementos más representativos de las ofrendas para los muertos.
Y en base a la creencia, es la que guía a los seres queridos que ya fallecieron en los altares colocados en los hogares y al más allá.