Ucrania anunció el jueves que la central, situada en el sur del país, había sido "totalmente desconectada debido a daños en las líneas".

La CFE aseguró que la central genera energía, firme y limpia bajo los más altos estándares internacionales de seguridad.

El mandatario de Ucrania envío el mensaje tras reunirse con el líder del organismo internacional, Antóno Guterres.

La central de Zaporiyia está ocupada por fuerzas rusas desde marzo, pocas semanas después del inicio de la invasión de Ucrania.

El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica pidió a Rusia y Ucrania a permitir el ingreso de un equipo de expertos de la OIEA "lo antes posible" para evaluar la situación.

La decisión judicial es considerada como histórica entre los japoneses, luego del caos sanitario por la central nuclear.

El jefe de la agencia estatal encargada de la zona prohibida de Chernóbil dijo que, "los servidores que manejan esta información desaparecieron (...) no podemos afirmar si (la zona) es completamente segura".

Los 169 miembros de la Guardia Nacional que custodiaban la central nuclear han sido llevados a Rusia como prisioneros de guerra.

La central nuclear de Zaporiyia, la planta nuclear más grande de Europa, dispone de tres líneas para enviar la electricidad que genera a la red.

Si hay una explosión, será el fin de Europa, expuso Volodímir Zelenski e indicó que los tanques rusos están equipados con cámaras termográficas para que los soldados sepan dónde disparar.