Durante el incendio de la catedral francesa, las llamas fundieron cientos de toneladas de plomo, por lo que se mide de forma constante su concentración en la zona.

Investigaciones por autoridades de salud no han podido determinar el origen del exceso de níquel y partículas de plomo en la sangre de los pacientes que provoca una misteriosa enfermedad.

Las autoridades ordenaron una limpieza profunda tras el incendio en Notre Dame, y se espera que se completen antes de que los niños regresen a clases.

La suspensión va a durar unos días, desde este jueves, para replantear las medidas de seguridad sanitarias para los trabajadores.

Las autoridades informaron que harán una "limpieza profunda" en guarderías y colegios aunque un medio detectó cantidades superiores de plomo en las inmediaciones de la catedral.

Las autoridades sanitarias francesas instaron a las mujeres embarazadas y a familias con menores de siete años, residentes en los alrededores de la catedral, someterse a un análisis de plomo en sangre.