El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell anunció el 26 de abril se abrirá el registro de vacunación anti-covid para niños de 12 años en adelante sin la necesidad de que tengan alguna comorbilidad.
Es natural que, ante esta noticia, muchos niños y padres de familia puedan tener dudas acerca de la vacuna y la seguridad de sus hijos, sin embargo esta aplicación tiene más beneficios que desventajas.
El médico pediatra Ricardo Molina señala que es de suma importancia que los menores cuenten con la vacuna contra el covid-19, ya que los niños son la población que más transmite la enfermedad, por lo que es necesario que estén protegidos para no contagiar a sus abuelitos o adultos con los que esté en contacto.
Las recomendaciones para esta vacunación son las mismas que en la de los adultos: simplemente hay que estar al pendiente de los efectos secundarios que la vacuna pueda generar en los menores, que son los mismos que en los adultos: dolor, cansancio, un poco de fiebre, entre otras.
“Pero es raro. La gran mayoría de los niños que se han vacunado, ya sea por comorbilidad o alguna otra razón no se han visto efectos secundarios diferentes a los de los adultos. Al contrario, los adultos se han visto más afectados por la vacuna que los niños, pocas veces presentan molestias”, declara Molina.
Señala que incluso en Estados Unidos, país que inició con la vacunación de sus infantes, no se han señalado problemas con este sector de la población, lo que quiere decir que la vacuna es completamente segura para ellos.
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En el caso de los menores con miedo a las inyecciones, aconseja que se hable con ellos sobre el impacto positivo que esta vacunación tendrá en su vida y la de los adultos a su alrededor, como sus abuelitos y papás, generándoles la seguridad de que el vacunarse ayudará a que todo mejore para todos y así convencerlos de enfrentar sus miedos para cuidar de los demás.
A los padres de familia les pide que no le teman a la vacuna. “A algunos padres les da miedo la vacuna por ser nueva y tienen miedo de que algún efectos que pueda tener, pero hay que convencerlos de que los niños se vacunen para que no tengan problemas, especialmente ahora que pronto volverán a la completa presencialidad”.