Con una carta escrita en náhuatl fue como Gibrán y su familia le dieron el último adiós a su hermana Marimar, arqueóloga de profesión, estudiante de maestría y trabajadora en la Universidad Veracruzana; una mujer que fue víctima de un accidente automovilístico que la dejó con muerte craneoencefálica.
Marimar tenía 30 años de edad y era activista y defensora de los derechos humanos, pero ahora se convirtió en donadora de órganos: dadora de vida después de la muerte. Su vocación de servicio y de apoyo a la gente ahora será preservado por tres personas más que recibirán sus riñones e hígado.
To suapiltsin, yek melauak tij mits teltasotaj.
Nochipa ti mits elnamikiske, uan amoj keman ti mits elkauaske.
Nochipa ti yetos itech to yolo.
Majkualtsin mis kuentachiwa to tiotsin
Dice la carta que leyó Gibrán, quien recuerda con amor a su hermana como una heroína, y lo que en español se traduciría como:
"Nuestra niña, de verdad te amamos mucho, siempre te vamos a recordar, jamás te vamos a olvidar, siempre estarás en nuestros corazones, que seas bien recibida y cuidada por nuestro Dios",
Con la donación de la mujer originaria de Cuetzalan del Progreso, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla registró la primera procuración multiorgánica en el Hospital de Traumatología y Ortopedia, desde donde este domingo fue enviado el hígado de Marimar al Hospital Naval en la Ciudad de México.
"Ella estaba por terminar su maestría, era muy valiente, investigó en la selva de Los Tuxtlas, en la región mas inhóspita de Veracruz y siempre inspiró a quienes la conocieron y sobre todo a mí. Cuando yo tenía miedo siempre recordaba su valentía y podría enfrentar las cosas", agregó su hermano Gibrán.
Durante 12 años, Marimar permaneció en lista de espera de una córnea tras tener un accidente con sus tareas, ahora se convirtió en la primera donadora en el estado este 2022, por lo cual también sus riñones, resguardados en la unidad San José del IMSS, servirán para ayudar a vivir a otras dos personas.
El doctor Francisco Morales Flores, director del Hospital de Traumatología y Ortopedia del IMSS en Puebla, señaló que en el país hay 23 mil personas en espera de un órgano, de las cuales alrededor de mil 100 son de Puebla. El especialista médico añadió que, en el último año la lista de espera paso de 21 mil a 23 mil personas en espera de un órgano.
El Instituto destacó que el año pasado fue compleja la donación de órganos y tejidos, tuvo una disminución considerable, esto por varias causas como la pandemia y los tabúes que afectan la cultura de la donación.
"La lista de espera de personas que buscan un órganos es infinita, nunca se terminan los pacientes y estos se van agregando cada vez y más si hay poca donación, la demanda es mayor de lo que obtenemos. El riñón y las córneas son los órganos más solicitados, pero el riñón encabeza la lista", dijo Morales Flores.
Tan solo de 2020 para 2021, las donaciones de órganos disminuyeron de 22 a tres y aunque la pandemia fue uno de los factores que redujo esta situación, el año pasado hubo 16 familias que se negaron porque querían que sus familiares fueran enterrados con sus órganos, precisó Santa Blanca Mora, coordinadora de donación de órganos del IMSS.
Reiteró que se debe continuar promoviendo la donación de órganos, difundirlo como un acto humano y de amor al prójimo, necesario para la sociedad mexicana, toda vez que la lista de espera va en aumento.
"En 2021 sólo hubo tres donaciones, dos fueron multiorgánicas y el total de órganos donados fueron dos corazones, dos hígados y cuatro riñones y dos córneas. La falta de donaciones mucho tiene que ver con la pandemia", concluyó Blanca Mora.
Para mayor información sobre los procesos de donación, se puede consultar la página del IMSS o el Centro Nacional de Trasplantes, www.imss.gob.mx o www.gob.mx/cenatra
“El IMSS en Puebla siempre a favor de promover la donación voluntaria y altruista de órganos y tejidos, esto no sería posible sin la bondad de los familiares quienes dicen si a la donación”, indicó.
CHM