Tras la prohibición de las terapias de conversión en el estado de Guanajuato, representantes de la iglesia cristiana afirmaron que se protegerán legalmente para evitar repercusiones, al asegurar que algunas personas se han acercado de manera voluntaria para “curarse” de la homosexualidad. Así lo manifestó Moisés Velázquez Reyes, representante de la Iglesia Cristiana Nueva Vida en Irapuato y del Comité Estatal de Guanajuato 2000.
“Eso es algo que ahora que está esta ley, pues no nos afecta, porque ellos están de acuerdo y obviamente nosotros ahora nos vamos a proteger con un documento en el cual ellos dan su consentimiento de que quieren ayuda, quieren, por decirlo, una terapia para salir de la homosexualidad y ellos la van a firmar; nos vamos a proteger en esa forma. No lo hacíamos, pero ahora con esta ley lo vamos a hacer, porque sí hay una manera legal, en la cual ya está hecho un documento en el cual, si ellos lo firman, no aplica esta ley, no es una prohibición a fuerza”, dijo.
Cabe recordar que fue el 4 de diciembre cuando, con 32 votos a favor y tres en contra, el Congreso del Estado avaló la prohibición de las terapias de conversión en Guanajuato. Con esta reforma se establecen penas de dos a seis años de prisión a quien realice, imparta, aplique, obligue o financie cualquier tipo de tratamiento o terapia que suprima la orientación sexual.
Además, si la agresión se comete en contra de menores de edad, personas con discapacidad, adultos mayores, personas privadas de la libertad o que no tengan capacidad para comprender el significado del acto, la sanción puede incrementarse hasta en una cuarta parte.
“Sin consentimiento, nunca a fuerza ni con violencia; esta ley realmente para mí es una ley inútil, porque ¿quién violenta a alguien para que cambie de su ideología? Quizá algunos, pero muy pocos, o sea, que sea a la fuerza; quizá los padres a veces quieren hacerlo, pero obviamente son los padres, es el dolor de ver la afectación de sus hijos en esa situación”, puntualizó.
El pastor de la iglesia cristiana indicó que estas prácticas se realizan durante los retiros anuales que organiza la congregación y que, al acudir voluntariamente, las personas reciben acompañamiento.
“Normalmente es a través de los encuentros y un seguimiento, pero no nada más es en la cuestión de la homosexualidad, es en cuestión de familias, de matrimonios que estaban por separarse; los llevamos al conocimiento de Jesucristo, es que ellos se restauren y que estas personas que están en la homosexualidad vuelvan a una identidad correcta de su sexo”, concluyó el representante de la Iglesia Cristiana Nueva Vida en Irapuato y del Comité Estatal de Guanajuato 2000.