Cuando aún era una niña, Gerardo, el hermano mayor de Lenia Ruvalcaba la llevó a practicar Judo a Mérida con el entrenador Agustín Cruz, “estaba buscando a niñas de mi edad y características físicas (en ese tiempo medía 1.68 metros). Al principio no tenía realmente idea de qué era el judo, con el tiempo me gustó; ahora es mi pasión”, afirma la atleta que representará a México en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020+1.
Agrega que también le nació la inquietud por ganar medallas: “asistir a competencias internacionales, representando a México es una de mis mayores motivaciones en este deporte, porque también mostramos que le ponemos corazón y somos unos guerreros”, afirma la atleta a través de una video entrevista desde España, en donde se encuentra preparándose para su participación en la justa paralímpica.
Fortaleza física y mental
Respecto a su preparación, Lenia detalla que se ejercita diariamente para estar físicamente lista para enfrentar a cualquier rival, aunque destaca el apoyo psicológico: “la fortaleza mental también es importante: la postergación de los juegos paraolímpicos te afecta, por eso es que, desde 2005, tengo el apoyo de una psicóloga del deporte, quien me ayudó a entender la situación de una mejor manera, a no decaer y tener la mente muy concentrada en los juegos. Además, para representar un país, tienes que tener un profesional para que, en vez de afectarte, te motive”, indica.
Ganadora de cuatro melladas de oro, incluyendo una en los Paralímpicos de Río 2016, recuerda que en Beijing 2008, obtuvo la medalla de plata, “pero me confié y no entrené los suficiente para Londres 2012; me quedé sin nada y regresé a México con un quinto lugar. Esta derrota me hizo más fuerte, porque supe reconocer en qué había fallado y me ayudo a retomar el sendero del triunfo en Río de Janeiro”.
Judo, mejor a temprana edad
La judoca considera que la práctica de este deporte a cualquier edad es importante, pero mientras más pronto comiences es mejor: “si su sueño es estar en los Juegos Paralímpicos deben de practicarlo a temprana edad; tampoco les debe de dar miedo, tienen que buscar un lugar en donde se sientan seguros y un entrenador que les brinde confianza. Y, sobre todo, poner atención en lo que les gusta hacer y para lo que son buenos”.
Añade que se podrán encontrar obstáculos en el camino, pero deben de superarlos “ser mujer y hacer un deporte de combate no es fácil: muchos piensan que no es para nosotras, entonces es un desafío doble. Para mí es un reto constante en el que les enseño a otras que sí se puede lograr lo que queramos, sin la necesidad de un hombre”.
Apoyos, fundamental
Lenia Ruvalcaba también resalta el apoyo de la familia y de los amigos para continuar en el deporte por más de dos décadas: “es fundamental; de no tenerlo, no lo podría soportar, porque es muy complicado mantenerse por varios años como un atleta de alto rendimiento”.
Igual de importante es el soporte de los patrocinadores: “las grandes marcas o las empresas siempre apoyan a gente convencional, por lo que tener a Citibanamex como un patrocinador exclusivamente para atletas paralímpicos, refleja que estamos en una época de cambios, lo que beneficiará a más atletas paraolímpicos en un futuro. Para mí, pertenecer al Team Citi, es una motivación extra en mi carrera deportiva”, asegura Lenia.
Además, considera que se ha hecho un gran trabajo en el Team Citi, porque “se ha enfocado en apuntalar a deportistas; en a buscar a los mejores en sus disciplinas, a los que tienen potencial para destacar, lo que es una muestra clara de inclusión, porque el deporte es inclusión, no solo para personas con discapacidad, sino en general: el deporte te enseña a trabajar en equipo, a respetar a tu rival, te ayuda a crecer y te enseña a ser empático, finaliza.
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