Donde termina el mar, una reflexión sobre la vida

Exponentes de la escena literaria de la ciudad acompañaron a la escritora Claudia Marcucetti en el análisis y discusión de su más reciente trabajo.

El texto fue calificado por los invitados como un “trabuco”, dada la diversidad de temas que aborda. (Foto: Leonel Rocha)
César Cubero
Monterrey /

Con un ambiente musical a la italiana, y con un auditorio lleno, se llevó a cabo en el Museo Metropolitano de Monterrey la presentación de la novela Donde termina el mar (Planeta), de la escritora ítalo-mexicana Claudia Marcucetti Pascoli.
La obra hace una reflexión sobre la acción y la calidad de vida en la vejez, y que navega entre otros puertos, por conflictos humanos como la ética y la moral.

La presentación corrió a cargo de Antonio Ramos Revillas, director de la Editorial Universitaria de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL); Pedro de Isla, novelista local y vocal del área de Literatura en Conarte, y la escritora regia, Sofía Segovia.
En esta novela Marcucetti Pascoli buscó, según dijo a MILENIO Monterrey, concretar, a diferencia de sus dos trabajos anteriores, la universalidad de su texto.

Para Pedro de Isla, dicho elemento atrapa al lector al abordar el conflicto moral de algunos personajes, mismos que a través de sus aventuras y confrontaciones por diversos países terminan por lograr su objetivo, en una obra de calidad “recomendada ampliamente”.

“Yo la sentí como una novela de aventuras, pero me faltaron como cien páginas porque yo quería más”, detalló.

Para Antonio Ramos, la novela “es un trabuco” dada la diversidad de temas que propone y resuelve Marcucetti Pascoli.

“Por un lado está el concepto de un héroe que es anciano, y por otro lado está la lucha entre las distintas generaciones.

“Y por otro lado es una novela de aventuras, de búsqueda de objetos misteriosos, bien ambientada, que sin duda va a dejar satisfechos a cualquier tipo de lectores”, mencionó el ganador del Premio a las Artes UANL del 2015, en el área de Literatura.

Mientras tanto, Sofía Segovia enfatizó que la obra es dura, arriesgada, y que “te gancha a través del personaje maravilloso del abuelo”.

Segovia explicó que el segundo gancho es “El Mapa del Tesoro”, en una obra que termina por ser “hiperrealista” y de alto nivel narrativo.



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