Estamos en tierra de zombis: Juan Villoro

En estos días “tenemos un mundo interconectado y, por lo tanto, contagioso, pero no tenemos uno unido”, considera el escritor.

En su libro más reciente apeló, “en lo fundamental, a la sinceridad de la memoria”. (Juan Carlos Bautista)
Jesús Alejo Santiago
Ciudad de México /

Encerrado en su casa, Juan Villoro ha tenido muchas más presentaciones virtuales abiertas al público; pero también un tiempo adicional para reflexionar sobre el tiempo en que vivimos y con una certeza: “Nadie pensaba que íbamos a estar en esta tierra de zombis, comunicándonos con aparatos a distancia, sin poder salir a la calle y ante un enemigo incierto e invisible.

“Todo esto ha sido tan extraordinario como hubiera sido establecer contacto con una civilización extraterrestre: actualmente tenemos un mundo interconectado y, por lo tanto, contagioso, pero no tenemos un mundo unido”, cuenta el escritor.

En entrevista por el lanzamiento del volumen de cuentos Examen extraordinario (FCE/Almadía, 2020), reconoce que el escenario en el que está inmersa la sociedad plantea desafíos numerosos, algunos de ellos positivos: “el hecho de que estemos ante un límite podría dar lugar a que se reconsideraran muchas cosas que están destruyendo el planeta, como el uso de plásticos, la contaminación de los mares, el calentamiento global”.

La mirada se da en el contexto de la aparición de un libro que no se ha podido distribuir de la misma manera que el resto de su obra, donde ofrece un muestrario de 30 años de trabajo, sumando dos cuentos que no habían sido recogidos en libros.

EVOLUCIONAR Y CAMBIAR

“El peor juez de un escritor es él mismo, porque compromete sus emociones, sus frustraciones, sus anhelos; creo que puedo escribir mejor ensayos literarios sobre otros autores, aunque para hacer esta selección apelé, en lo fundamental, a la sinceridad de la memoria: cuáles eran los cuentos que regresaban con más fuerza a mí en el recuerdo”, explica Villoro.

Por ello, no los quiso releer en forma analítica, aun cuando sí tuvo presente equilibrar temas y recursos formales: que no todos estuvieran escritos en tercera o en primera persona, o que los relatos protagonizados por mujeres estuvieran presentes.

“Apreciamos mucho que alguien sea congruente consigo mismo, pero también que evolucione, aprenda y cambie. Esperaría que este libro fuera, por un lado, expresión de ciertas afinidades y de preocupaciones comunes que he tenido a lo largo de las décadas y, al mismo tiempo, que manifieste sorpresas, cambios formales y aprendizajes adquiridos en el camino”, enfatiza el autor. 

Villoro no deja de pensar en Examen extraordinario como una relectura de sí mismo, sino también como “una oportunidad de someterte a examen”, sobre todo cuando llega un aniversario y se vuelve inevitable revisar el pasado.

“Siempre me ha sorprendido que se use esta expresión para la última oportunidad de aprobar una materia, parecería que al ser algo extraordinario puede ser una cosa fantástica y es que los mexicanos hemos encontrado eufemismos para matizar nuestras múltiples tragedias”.

​La presentación de Examen extraordinario se va a realizar con una conversación entre Villoro y Paco Ignacio Taibo II, hoy, a las 19 horas, con transmisión en vivo en las páginas de Facebook y de YouTube del Fondo de Cultura Económica y de Almadía.

Y ADEMÁS

DOS EDITORIALES SUMAN ESFUERZOS

La conjunción de esfuerzos entre Almadía y el FCE es considerada por Villoro como lo más importante de Examen extraordinario, “una manera de sumar entre formas distintas de llegar a la edición: la principal editorial del Estado mexicano y una empresa oaxaqueña que ha apostado por tener una circulación cultural muy significativa”.