El ex boxeador Julio César Chávez tuvo una de sus mayores peleas cuando enfrentó su adicción a las drogas; recientemente, en el programa Super Deportivo Radio de Radio Trinidad, el César del boxeo rememoró el día en el que se quiso suicidar.
"Recuerdo que comencé a vomitar sangre. Empecé a perder todo lo que había ganado. Mi esposa me demandó por alcohólico y porque la trataba mal. Me demandó el Gobierno de México. Sentí que se venía el mundo encima, entonces opté por querer quitarme la vida", señaló.
Asimismo, señaló que para su fortuna el balazo con el que intentó quitarse la vida 'salió para el otro lado', cosa que le permitió recapacitar, rehabilitarse y limpiarse de todas las drogas que había llegado a consumir.
"Toqué fondo cuando intenté suicidarme. Afortunadamente la pistola no disparó y cuando disparó el balazo salió para otro lado", relató Chávez.
El otrora boxeador, que estuvo en más de 100 peleas, reconoció que si hubiera tenido éxito a la hora de dispararse no le hubiera dejado ningún legado a sus hijos y que la gente lo hubiese recordado más 'por drogadicto' que por lo hecho en el encordado.
"Si me hubiera suicidado no hubiera sido el boxeador que fui, porque la gente me hubiera recordado como un drogadicto. ‘Fue un buen boxeador, pero se mató por drogadicto’. La verdad no le hubiera dejado un legado a mis hijos y a todo México, porque si me suicidaba ¿De qué hubiera servido haber llegado a 90 peleas invicto? De nada. Este triunfo es algo que Dios me dio. Una segunda vida que me permitió vivir Dios. La verdad que ahora la estoy aprovechando para tratar de ayudar a gente que le pasó lo mismo que a mí", confesó.
- Te recomendamos En Culiacán están los narcos más buscados del mundo y son mis amigos: Julio César Chávez Boxeo
Además, El César del Boxeo recordó el calvario que fue estar dentro del mundo de las drogas y que de no haber entrado a lo mejor hubiera sido el mejor boxeador en la historia.
"Tuve una trayectoria muy larga. Me retiré muy viejo. Creo quedé a deber algunas cosas, más allá de haber llegado a 90 peleas de manera invicta. Si yo no hubiera caído en esa maldita adicción que fue la drogadicción y alcoholismo, seguramente estarían hablando no solamente con el mejor boxeador de México, sino del mundo entero. Yo hubiera llegado a más de 100 peleas de manera invicta. Cuando yo llevaba 90 peleas invictas y 15 años sin perder, yo sentí que lo había logrado todo. Entonces, perdí el respeto al boxeo y también me perdí el respeto a mí mismo y empecé una vida que ustedes ya conocen y vinieron todas las derrotas juntas", reconoció.
El ex boxeador de 58 años reconoció que fue 'la decisión más estúpida' el refugiarse en las drogadas debido a la fama que había adquirido debido a su calidad dentro del encordado.
"Era muy asediado por la gente, tenía mucho dinero, tenía todo y sentí que lo había logrado todo. Todo ese entorno y éxito me llevó a perderle el sentido a la vida, por tenerlo todo. Eso fue lo que me llevó a consumir drogas, me sentía solo y triste a pesar de estar rodeado de mucha gente. Opté por la decisión más estúpida de todas que es la droga, ahí me refugié y eso me llevó a un fondo que no tenía fin. Lo demás, ustedes ya lo saben".
Actualmente, Julio César Chávez lleva 11 años limpio de cualquier sustancia y ha puesto clínicas de rehabilitación para personas que atraviesan las mismas situaciones que él tuvo que llevar a sus espaldas.
EML