En el juego Metz vs. Brestois de la Ligue 2 (segunda división de Francia) un árbitro se despidió de las canchas regalando sus tarjetas y escribiendo "gracias" con la espuma que portan los silbantes.
Yohann Rouinsard, de 45 años de edad, es el nombre dicho juez, quien fue aplaudido por los futbolistas y aficionados presentes durante el señalado cotejo.
Dicho encuentro también fue el último de la temporada 2018-2019 del circuito de plata galo, donde los clubes protagonistas en la retirada del citado árbitro consiguieron su pase a la Ligue 1.
LSPM