Actualmente Italia es el país más afectado por la pendemia del coronavirus en Europa, pues el país de la 'bota' ya registra poco más de 3 mil 400 muertes derivadas de esta enfermedad.
Sin embargo, y de manera un tanto curiosa, se culpa a un duelo de la Champions League de haber sido uno de los presuntos factores que facilitó el brote tan violento del Covid-19 en la península itálica.
Dicho encuentro ocurrió el pasado 19 de febrero, esto cuando el Atalanta y el Valencia se midieron en la ida de los Octavos de Final de la Liga de Campeones, duelo que se efectuó en el Estadio Giuseppe Meazza, en Milán.
Según Francesco Le Foche, un inmunólogo especialista del policlínico Umberto I, en Roma, afirmó para Corriere Dello Sport, que la exposición masiva de personas, en espacios tan reducidos, favoreció a una grave propagación, misma que no sólo afectó a aficionados, sino también a jugadores. Hay que recordad que el 35% del plantel naranjero está infectado.
La congregación de miles de personas, a dos centímetros una de la otra, aún más asociada a las entendibles manifestaciones de euforia, gritos, abrazos, puede haber favorecido la replicación viral. Estamos hablando del énfasis colectivo de un partido histórico. Debo imaginar que casi todo el mundo acudió a ese partido, probablemente incluso asintomáticos y febriles", subrayó
Y agrega: "Este virus continuará propagándose. Nosotros, gracias también a haber estudiado lo que está sucediendo en el norte, lo hemos reducido a términos mínimos, pero no es suficiente volver a la realidad de antes"
Cabe mencionar que el periodista español Kike Mateu, quien cubre información del Valencia para El Chiringuito, estuvo presente aquella noche del miércles 19 de febrero en el San Siro. Una semana más tarde, dio positivo a coronavirus.