El Liverpool logró la remontada, al haber derrotado 4-0 al Barcelona en el Anfield Road, marcador con el cual superaron el 3-0 en contra que se llevaron tras la ida en el Camp Nou.
La victoria va directo a la gran colección de hazañas que tienen los Reds a lo largo de su historia, tal y como la que se vivió en Roma, en 1977, o la de Estambul, en el 2005.
Ante ello, te presentamos algunas de las claves más importantes para que los ingleses derrotaran a los culés y avanzaran a la Gran Final de la Liga de Campeones.
PLANTEAMIENTO
Sin Salah, Firmino y Keita, Jürgen Klopp conformó un plan de juego impecable. Lanzando a Shaquiri y a Origi para acompañar a Sadio Mané, sin dejar de lado el gran orden defensivo, comandado por Van Dijk y Matip. La pieza clave en la definición fue Georginio Wijnaldum.
La idea de los Reds nunca varió. Presión agobiante en todo momento. La clara muestra de ello, es que el Barcelona estaba totalmente destruido al final del encuentro.
MENTALIDAD
Táctica y técnicamente queda claro que el alemán le ganó la partido a Ernesto Valdverde no sólo en el duelo en Anfield, sino -en general- en toda la eliminatoria.
Lo demás se lee en la gran mentalidad que el Liverpool tuvo; nunca dejó de creer, siempre fue la frente ante un Barcelona timorato, demasiado defensivo y sin variantes en la alineación tras lo ocurrido en el partido de ida.
JÜRGEN KLOPP
Al final de cuentas, todo recae en la labor de Klopp. El Liverpool fue una aplanadora. Hubo factores tácticos que dieron resolución a este partido, pero -a final- lo que representó tener en el banquillo al teutón, con su gran mística y filosofía, fue una clave para que los ingleses se llevaran la eliminatoria.