Jonathan Orozco celebró este martes el cumpleaños de sus hijos Luka y Bastian, pidiendo a sus invitados que en lugar de regalos, hagan una aportación voluntaria.
Explica que al igual que en los dos años anteriores, la cantidad recaudada será duplicada y se destinará a adquirir aparatos auditivos que serán entregados a niños del Instituto Lagunero de Audición.
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"Es una manera de regresar un poco lo que Dios nos ha dado, desde que nació Bastian. Serán 8 años que tenemos esta temática, nos gusta enseñarles a ellos a ser agradecidos, que gracias a Dios y al trabajo de su padre tienen muchos beneficios, pero también hay que represarle a nuestra familia y a la demás gente".
El guardameta de Santos Laguna admite que fue difícil los primeros años hacerles comprender a sus hijos, sobre todo al mayor, porque no es fácil asimilar que no recibirá regalos en su piñata, pues es la ilusión de todos los niños.
"Fue complicado con mis hijos explicarles el por qué de las cosas y gracias a Dios lo han entendido. Desde que llegamos a La Laguna les hemos compartido eso que nos enseñó Alejandro (Irarragorri), Pepe (Riestra), Dante (Elizalde), de ganar sirviendo y tratamos de hacerlo en la mayor escala posible, para mí es seguir ayudando a La Laguna, a su gente, de alguna u otra manera, a veces la reliquia no es la gran cosa, pero esto para mí y mis hijos es muy importante, el compartir un poco de ellos y nosotros a una beneficencia, que en esta ocasión será para adquirir aparatos auditivos, el año pasado fue temas de visión, el primer año a una casa hogar", comentó.
También dijo que a la entrega de los donativos, él junto con hijos, acuden personalmente, ya que eso les permite conocer las necesidades de los beneficiados con la ayuda, resaltando lo importante que es inculcar valores, sobre todo en los días actuales.
"Nos desviamos de lo más importante y nos vamos por temas de estar todo el día en un juego, frente al televisor, y dejan de ser niños, pierden esa infancia que quisiéramos. Los valores son importantes y vienen desde la casa, nos gustaría fuera más fácil, que en la escuela nos los educaran y en casa decirles nada más qué hacer, pero esto viene desde el hogar, desde abajo, de inculcarles a hacer una obra, a ser respetuosos, llevarse bien con sus mismos hermanos y compañeros de escuela, eso es más importante para mí, más de lo que puedan tener o lo que uno les pueda dar.
Los valores y tiempo de calidad es más importante, de pronto no tenemos tiempo por cuestiones de concentraciones, viajes, pretemporada, como en cualquier trabajo, pero debemos darnos tiempo para ellos".
Orozco describe cómo es vivir en La Laguna
Jonathan Orozco disfruta vivir en la Comarca, por eso ya adquirió su casa aquí y explicó las razones.
"Obviamente no quiero maximizar ni nada, en Monterrey es otro tipo de ambiente, se come futbol, se cena futbol, francamente la vida gira en torno al futbol donde sea. Aquí en la Laguna uno puede andar tranquilo, salir, caminar, la gente saluda, pero hasta ahí, se divierte contigo, no es tan apasionada ni está jode y jode, te deja ser, platica, cuenta historia, eso me gusta mucho aquí, hay muchos santistas de hueso colorado, gente que me cuentan desde el primer equipo, es una vida diferente y a nosotros nos ayudo mucho como familia.
Ahora quiero enseñarles una faceta de mí que nunca pude mostrar en Monterrey, porque allá sólo eres futbolista, no podías ser persona. Es tanta la presión que lo importante es que te vaya bien en la cancha y lo de afuera no importa lo que hagas y si no juegas bien todo lo que hagas fuera está mal, por eso trato de mostrar otra faceta, a lo mejor en la cancha sí soy gruñón, gritón, pero fuera soy divertido. La idea es disfrutar de la vida, de las cosas buenas como malas, como en el equipo, que tuvimos un arranque malo, pero no vamos a caernos por eso", compartió.
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