Tras el empate de Islandia ante Argentina, en su debut mundialista, otro suceso histórico tendría lugar en el tercer día de actividades de esta Copa del Mundo, puesto que Perú, luego de 36 años de espera, volvería a jugar en una Copa del Mundo, en donde chocaría ante Dinamarca.
Era el duelo de sus vidas para los once elementos que Ricardo Gareca eligió para este encuentro. Y así lo entendieron, por lo menos en los primeros 25 minutos, tiempo en donde los incas lograron abrir en varias ocasiones a la defensa danesa, con buen despliegue de juego, verticalidad, recuperación y velocidad por las bandas; sin embargo, este dominio resultó infructuoso, dado a que no consiguieron inquietar de gran forma a Schmeichel.
Con ello, el cuadro de Åge Hareide comenzó a equilibrar el partido, pero igualmente sin grandes contratiempos para la zaga peruana. Sin embargo, cuando el partido parecía más estancado, sobrevino un penal en a favor de Perú; el hombre encargado de cobrarlo fue Christian Cueva, quien había recibido previamente la falta. Para su mala suerte, el mediocampista erró el intento.
La segunda mitad arrancó con la tenencia peruana, pero las fallas ante el arco rival no dejaron a los incas. Con ello, llegó el acierto danés; en un pase filtrado, Yurary controló el esférico para definir ante la salida de Gallese el 0-1. Los dirigidos por Gareca, aún así con el ingreso de Paolo Guerrero, continuaron generando peligro sobre la portería de Schmeichel, pero simplemente no fue su día en el ataque.
De esta forma, se consumó el resultado definitivo (0-1), el cual rompe una racha de 15 duelos sin perder para los andinos. Por su parte, los comandados por Åge Hareide llegan a nueve partidos sin recibir gol.