Tras la goleada de Rusia sobre Arabia en la inauguración, Uruguay y Egipto tenían la tarea de cerrar la actividad de la primera jornada del Grupo A en Ekaterimburgo, en un duelo que no ofreció grandes emociones, sino hasta el final del mismo, con el tanto de José María Giménez, con el cual La Celeste se impuso 0-1.
En el trámite general del partido, los charrúas fueron mejores a los faraones, puesto que gestionaron los tiempos del encuentro a su gusto, empleando una buena defensa y aprovechando la falta de 'punch' ofensivo de parte de los africanos, provocada por la ausencia de Mohamed Salah.
El equipo dirigido por Tabárez fue el que tuvo, por ende, las mejores oportunidades para romper el empate, todas ellas gestadas en los botines de Luis Suárez; de no ser por el tanto anulado, al minuto 24, los intento del atacante del Barcelona se encontraron con la figura de Mohamed Elshenawy.
No obstante, sobre el final de encuentro, y tras salvarse luego de un magistral cobro de un tiro libre, cortesía de Cavani, José María Giménez, aprovechando una gran asistencia de Carlos Sánchez, se alzó dentro del área, rematando efectivamente el esférico para poner el gol del triunfo.
Con esto, Uruguay rompe una racha de 48 años sin poder ganar en su partido de debut en una Copa del Mundo; la última vez que sucedió esto, fue cuando se impusieron por 2-0 a Israel en México 70’. A pesar de la derrota, el guardameta egipcio quedará como la gran figura del encuentro.