Yair Rodríguez está emocionado por regresar a pelear en México después de cuatro años. En particular a la arena Ciudad de México donde salió ovacionando por el público y con un bono a performance de la noche la última vez en UFC 188, pero tomar el evento estelar del 21 de septiembre no fue fácil.
“La ciudad de México siempre es un gran reto, es increíble por la gente, pero es un reto por la altura, la alimentación y todo lo que representa”, explicó en entrevista con La Afición.
Luego de varias semanas de negociación se enfrentará al Jeremy Stephens, sembrado número ocho de la división pluma, donde el mexicano ocupa el séptimo puesto. “Estoy con todas mis energías enfocadas en Jeremy Stephens, pero la verdad estoy un poco descontento con el rival que se me dio, no tengo nada en contra de él, la verdad esperaba a alguien mejor rankeado. Un top 5, yo quería pelear con Zabit (Magomedsharipov), no sé qué pasó, yo tenía ganas de representar a mi país en contra de él en México. Por ahí José Aldo también estuvo en las pláticas, creo que ellos tienen otros planes, pero por el momento vamos a enfocarnos en sacar la pelea en casa”, agregó.
La preocupación se basa en el futuro, pues espera llegar pronto a la pelea por el título y buscaba un oponente que lo pudiera catapultar: “Si hubiera peleado en contra de un top 5 me hubiera acercado un poco más a la meta, que es pelear por el título, todos están muy duros en el top 5 y top 10”, consideró el chihuahuense.
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No es que no considere a Stephens un rival digno, por el contrario sabe del peligro que representa: “Tengo que analizar más peleas de él, pero es muy sólido, tiene básicos muy sólidos, es creativo, tiene poder, aparte de que es buen luchador y hay que estar despierto. Es muy peligroso y como viene de perder dos querrá sacar la casta y para eso estamos los mexicanos, para mostrarle de que estamos hechos aquí en tierras aztecas”.
Yair hará la mayor parte de su campamento en Albuquerque, Nuevo México en el rancho de su amigo Donald Cerrone junto a su coach Israel Martínez, pero también trabajará en la ciudad de México en la academia de Mario Delgado, con quien se dijo agradecido.
Luego de la negociación para esta pelea, prefiere no ver a futuro hasta no salir de la jaula con el puño en alto: “Ya no se que esperar, yo tenía tiempo hablando de ciertas peleas, sin firmar nada en concreto, pero no se dio como yo esperaba. Pueden pasar muchas cosas en la peleas y yo no sé qué rival pueda surgir de esto… pero vamos con la mentalidad para ganar”.
Finalmente, dijo que espera ver muchas caras nuevas en la Arena, pues su base de seguidores ha crecido notablemente en los últimos años. “para aquellos que no conocen muy bien mi carrera o mi estilo de pelea será una gran oportunidad y ojalá que les guste el trabajo arriba de la jaula”, adelantó el ganador de la primera temporada de The Ultimate Fighter Latinoamérica.
LSPM