Jaime Munguía, campeón de peso ligero de la Organización Mundial de Boxeo, alumno de la leyenda viviente, Erick "El Terrible" Morales, fue el invitado de honor de la emisión semanal del Instituto Poblano del Deporte "Entre Campeones", donde el joven pugilista compartió su historia de vida.
Teniendo como ejemplo e inspiración a su padre, Munguía confesó que desde niño fue un apasionado del deporte, siendo el boxeo lo que a él más apasionaba y de ahí, que de la mano con su familia, comenzó su camino en la disciplina de los puños, donde comenzó a despuntar luego de varios meses en el gimnasio.
Jaime reconoció durante la plática que a lo largo de su carrera han sido varios los retos que ha debido sortear, donde su prioridad siempre fue el estudio y el deporte, aunque reconoce que por momentos tuvo dudas ya que el camino no fue sencillo y sembró la incertidumbre en más de una ocasión, sin embargo tuvo la entereza para superar las adversidades.
Tras iniciarse a los diez años en el boxeo amateur, sus primeras cosechas se dieron en la Olimpiada Nacional con medallas de oro, lo que a él sirvió para decidirse a dar el paso para convertirse en profesional, donde su sueño siempre fue lograr un título del mundo, que con base en el esfuerzo diario, en el trabajo, finalmente se concretó hace un par de años.
En su mensaje, señaló que sin importar la actividad que se decida emprender, siempre hay que tener la determinación de nunca rendirse hasta alcanzar las metas, donde la disciplina y constancia son claves para llegar, pero sobre todo para mantenerse en lo más alto.
AFM