El 4 de septiembre de 2024 dos noticias simultáneas paralizaron al país: una era urgente y la otra, popular y superflua, pero ambas tenían a la sociedad en vilo. Por un lado, la reforma judicial anunciada por el presidente era aprobada por la Cámara de Diputados, en medio de protestas y tras 12 horas de discusión legislativa.
Por el otro, Adrián Marcelo, el villano del reality más visto en la historia de México, abandonaba La Casa de los Famosos en medio de polémicas, denuncias públicas de violencia de género y comunicados de patrocinadores anunciando que dejaban de auspiciar el programa de Televisa. Todo lo anterior sin que fuera claro si él se iba por decisión propia o por orden de la producción.
La salida de Adrián Marcelo estaba relacionada con denuncias de violencia machista y la acusación había sido una constante en las siete semanas que llevaba el programa al aire. Pero la noche del 3 de septiembre la discusión había llegado a un punto insostenible. La producción citó a los participantes en la sala de la casa. Todos ocuparon un asiento del sillón amarillo y miraban tensos una pantalla de televisión vertical, como la de los celulares, donde dos conductores aparecían para hablar con ellos y encender los ánimos.
Un reality show asediado por la crítica
Odalys, una de las conductoras, le dijo a Adrián Marcelo que pusiera atención y entonces un video empezó a correr en la pantalla. Se trataba de las reacciones de los participantes a la eliminación de la concursante ‘Gomita’ el domingo previo. Entonces la cámara se concentra en Adrián Marcelo y sus compañeros de cuarto y éste, supuestamente en broma, comenta: “una mujer menos para maltratar” y los hombres que lo flanquean se ríen con él.
“Lo dije por la bajeza que sufrí de parte de Arath y de Gala al insinuar que estoy aquí para maltratar y violentar mujeres”, refutó Adrián Marcelo a la conductora y agregó que no lo decía de forma literal, sino en tono irónico. La ausencia de disculpas molestó a la actriz Gala Montes, una de las participantes más populares, y comenzaron a discutir hasta los gritos. Montes le repetía que era un misógino y él le reviraba que ella “estaba adoctrinada”.
Mientras tanto los otros siete participantes estaban quietos, volteando la mirada y evidenciando su incomodidad. Finalmente, Gala se puso de pie para tranquilizarse. “¡Vete ya del programa!”, le dijo a Adrián Marcelo y éste le respondió, en ánimo condescendiente, que no era posible y que él ya lo había pedido a la producción. “Si te quisieras ir, te vas y ya. Agarras tus cosas y te vas. ¡Nada más que te faltan huevos!”, sentenció la actriz.
Horas más tarde, casi a las 2 de la mañana, la producción despertó a los integrantes de la casa para anunciarles que Adrián Marcelo había decidido abandonar La Casa de los Famosos. Sin embargo, a más de una semana de su salida, la polémica y las consecuencias que trajo consigo no han dejado de hacerse presente y, con ello, aparece una serie de dudas fundamentales:
¿Quién es Adrián Marcelo?, ¿cómo es posible que un personaje emanado de las redes sociales haya puesto en jaque a la producción principal de una de las televisoras más grandes del mundo? y, más aún, detrás del interés inédito que desató La Casa de los Famosos, ¿no hay mayor lección que la de que somos una sociedad que se distrae fácilmente de lo importante?
De dónde viene Adrián Marcelo
El origen de Adrián Marcelo Moreno Olvera es en realidad poco notable. Nació en 1990 en Monterrey y llevó una vida de clase media alta, es decir, creció en una colonia acomodada del municipio de la capital neoleonesa, pero no formaba parte de los círculos de élite de San Pedro Garza García. Ello se nota en el hecho de que estudió la preparatoria privada en la PrepaTec Eugenio Garza Lagüera, pero no en los bachilleratos más exclusivos, como el campus Santa Catarina o el American School de Monterrey. Posteriormente estudió Psicología, en la Universidad Autónoma de Nuevo León.
A los 23 años, en sus últimos semestres de la carrera, comenzó a forjarse su camino como estrella del internet gracias a Vine, una red social lanzada en 2013 en la cual los usuarios podían postear videos que no duraban más de seis segundos. Naturalmente, se volvió un contexto fértil para la comedia, videos de caídas, accidentes y chistes rápidos plagaban aquella red social antes que desapareciera en 2017.
En México, Vine sirvió de plataforma para comediantes como Ricardo O’Farrill y Chumel Torres, pero también fue una primera plataforma para Adrián Marcelo. En 2014 envió un video a manera de casting a Willy González, entonces director de deportes en Multimedios, para que lo invitara a aparecer en la televisora.
Fue de ese modo que empezó a salir como patiño en programas deportivos y en otros como ‘Acábatelo’, conducido por Mario Bezares; ‘Destardes’, donde aparecían las estrellas infantiles Belly y Beto; y ‘Mitad y mitad’, conducido por Poncho De Nigris, el que terminó por consolidar la carrera en televisión de Adrián Marcelo.
‘Mitad y mitad’ era un programa donde un grupo de mujeres tenía citas con solteros codiciados para enamorarlos. En su tercera edición los solteros eran Enrique Mayagoitia, Carlos Escamilla y Adrián Marcelo. El reality de amor tuvo éxito para él y Karina Puente, empezaron a salir en 2014 y se casaron en diciembre de 2021.
Los siguientes años para Adrián Marcelo fueron oro, pues se convirtió en uno de los conductores más queridos de la televisión regia. En ese momento su personalidad imprudente y muchas veces ‘bully’ que se manifestaba al hacer chistes de la apariencia física o el peso de sus invitados no derivó en una cancelación, sino en perfilarlo como un conductor disruptivo. En 2020 conseguiría tener un programa de televisión donde él podría tener todo el control creativo. Así surgió ‘Adrián Marcelo presenta’, un programa de revista.
En esa época sus bromas con actitudes misóginas y violentas se intensificaron. Narrando la transmisión de un partido de fútbol entre las Chivas y el Pachuca, por ejemplo, cuando la pelota había quedado inmóvil en el campo hizo un comentario: “prácticamente se podría considerar un feminicidio, la deja muerta ahí en el área”, dijo. También llegó a hacer bromas sobre el intento de homicidio al jugador Salvador Cabañas.
Su humor dio pie a rumores de la violencia machista y estos parecían confirmarse; en abril de 2023 la Fiscalía de Nuevo León abrió una carpeta en su contra por abuso sexual. En ese momento, un video de su programa pregonaba que era perseguido por cientos de mujeres y advertía: no lo cancelen porque no van a poder. “Tiene un ejército dentro de él”.
Pocos meses después, en junio de 2023, Adrián Marcelo anunció su salida de la televisora y el inicio de un proyecto personal centrado en las redes sociales. Desde su canal potenció proyectos que ya tenía, como los pódcast ‘Conversaciones’ y ‘Hermanos de leche’.
También lanzó los videos donde se dedicaba a conversar en tono burlón con personas que tienen trabajos estigmatizados, como el trabajo sexual o el desasolve de cañerías, y también donde iba a colonias con altos índices delictivos a alburear a la gente que encontraba en la calle a cambio de darles al final algo de dinero. Los videos de ‘Radar’ cuentan con cientos de miles de vistas y su canal de YouTube es seguido por más de 3 millones de personas.
Adrián Marcelo volvería formalmente a la televisión el 21 de julio de 2024 con la segunda temporada de La Casa de los Famosos.
Su estatus en el patriarcado y en el internet
“Todo el mame de Adrián Marcelo y su grupito gira alrededor de la amistad y de ser buen amigo, ser leal, ser buen compa”, dice Rolando Robledo, quien ha creado algunos exitosos proyectos de contenido en internet como ‘Out of Context Monterrey’ y ‘Rotonda de los memes’. Cuando sus memes estaban en auge, Rolando fue entrevistado en ‘Conversaciones’, el podcast de Adrián Marcelo y Fernando Suarezserna, mejor conocido como Bandido Diamante.
“Bandido Diamante me llegó a decir que un buen amigo es alguien al que le hablas a las 3 o 5 de la mañana y le dices ‘oye maté a alguien’ y te pregunta ‘¿dónde enterramos el cuerpo?’. Entonces tienen esta concepción de la lealtad donde entre más de la verga eres, y más estás dispuesto a aceptar esas conductas en el otro, más grande es tu amistad”, dice Robledo.
Dejó de tener contacto con ellos cuando una vez, en un grupo de WhatsApp, Adrián Marcelo quiso hacer una broma a propósito del sexo consensuado y éste y el resto del grupo se tomaron a mal una llamada de atención que Robledo les hizo. “Parten de que el que ve lo malo, es porque tiene la maldad en el ojo. O sea, si tú ves un problema con lo que yo estoy haciendo es porque tú estás mal”.
En ese contexto puede entenderse a sus amigos más cercanos frente a las polémicas que éste protagonizó dentro del reality show, pero también tras su salida.
Por ejemplo, Iván ‘La Mole’, con quien Adrián Marcelo conduce ‘Hermanos de leche’, tachó a la producción de Televisa y al resto de los participantes de ser “ositos cariñositos” y propagó mensajes que acusaban a Gala Montes de victimismo frente a las actitudes misóginas de su amigos. También están los cientos de miles de seguidores que se refieren a Adrián Marcelo como “El Patrón” y que replican mensajes de odio no sólo hacia las mujeres participantes del reality –y el feminismo en general–, incluso llevaron su discurso fuera de las redes sociales.
Como el caso de un gimnasio en Monterrey que pegó recortes de la cara de Gala Montes en todos los sacos y peras de box para golpear la foto de la actriz.
Para Paulina Millán, profesora de la Escuela de Humanidades y Ciencias Sociales del Tec de Monterrey, la relación que dibujan Adrián Marcelo y sus amigos es un ejemplo prístino de lo que es el pacto patriarcal.
“Existe esta noción de querer entender el pacto patriarcal como una especie de muy buena amistad entre hombres e incluso algo equiparable a la sororidad, pero no es lo mismo: no se trata de relaciones afectivas y de apoyo, sino de complicidad. Dentro de este pacto, estos hombres son conscientes de que existe una falta y aceptan encubrirla y defenderla con tal de defender su estatus y condición de poder”, detalla.
Por eso, influencers y generadores de contenidos anclan su importancia en las personas que son capaces de proyectar.
“En el caso de Adrián Marcelo sus reflexiones nunca iban orientadas a preguntar o pedir que le explicaran por qué le decían que sus actitudes eran machistas y misóginas, sino más bien a decir ‘no me digas esto porque yo no soy eso, y no quiero tener esa etiqueta porque va a ser lo que las demás personas verán de mí’”, profundiza Millán y añade que, para ella, ese etiquetado que le da Gala a Adrián Marcelo detona en él una reacción explosiva y violenta porque lastima su estatus en el patriarcado y en el internet.
De la ‘manosfera’ a los ultras
Otra novedad que Paulina Millán ve en el fenómeno de Adrián Marcelo es que le parece que su discurso no es el típico del “machito regio” que se caricaturiza desde la Ciudad de México.
Ve en él una inspiración clara de Andrew Tate, un influencer británico-americano que se autoproclama misógino y que fue arrestado por violación y trata, y del psicólogo Jordan Peterson, que se ha dedicado a propagar teorías de la conspiración en contra de los movimientos feministas; en su conjunto construyen algo que se conoce como la “manosfera” y que es toda una comunidad de hombres, principalmente jóvenes, que en internet se coordinan para esparcir un discurso de superioridad masculina.
“La gen Z es una generación muy expuesta y cercana a los movimientos sociales y con información que a los millennials nos tomó mucho tiempo obtener. Es una generación reaccionaria y conservadora. Para mí se debe a un tema mediático, es decir, es una generación que creció con algoritmos y cámaras de eco y esa segmentación reafirma sus valores, conservadores o no.
Además, son chicos socializados en un patriarcado que sigue vivo y activo y es ahí donde la ‘manosfera’ en redes sociales refuerza el discurso de que los hombres jóvenes están perdiendo algo, que están en riesgo y que es culpa de las mujeres”, explica Millán.
En segunda instancia, otro factor atractivo para los jóvenes es el hecho de que la diversidad sexual y los derechos humanos ya son conceptos institucionalizados y enfrentarse a ellos se percibe como una postura antisistema. Así se fraguan proyectos de financiamiento en Europa y Latinoamérica para promover la creación de organizaciones y vocerías de una agenda de ultraderecha.
De ahí que la irrupción de Adrián Marcelo en el internet no sea sólo la del machismo típico en nuestro país, sino la de una derecha globalizada que llega a México y que, en este caso, fue catalizada gracias a la televisión y un reality show.
La desbandada de anunciantes del reality show
Desde el domingo 1º de septiembre en que Adrián Marcelo hizo el comentario de “una mujer menos para maltratar” y hasta su salida, fueron varias las marcas que hicieron público su descontento y anunciaron su retirada del programa. Los primeros en abandonar La Casa de los Famosos fueron ‘Holanda’, ‘Rexona’ y ‘Knorr’, quienes recalcaron que las actitudes expuestas en el reality no coincidían con sus valores de marca.
Posteriormente, ‘Vips’, ‘Cklass’, ‘Nestlé’, ‘Domino´s’, ‘Lala’, ‘Nutrioli’ y ‘Jade Cook’ hicieron lo propio y en la misma línea discursiva. En la última gala de eliminación, el 8 de septiembre, el patrocinador encargado de llevar a los expulsados fuera de la casa, ‘DiDi’, ya no apareció, y lo achacó también a una diferencia de valores con el programa.
Según expertos, el deslinde de marcas ocurre muy tarde y encima es oportunista: si realmente fuera una prioridad para estas empresas erradicar los discursos machistas, no hubieran aceptado desde el inicio auspiciar un programa donde estaba Adrián Marcelo, cuyas actitudes eran ya de conocimiento público.
Para Alejandra Higareda, directora de Malvestida, y Denise Márquez, su editora, hay un lado positivo que rescatar en la actitud de las empresas vinculadas a La Casa de los Famosos.
“Estamos confundiendo la responsabilidad que tienen las marcas, la cuestión no es revisarles el historial, sino celebrar que actuaron en el momento que se requerían acciones contundentes. Para mí es un mensaje contundente, quizá no en tiempo y forma, pero sí en la medida que ayudará a repensar los formatos y el tipo de discursos que se permiten”, explica Márquez.
Higareda coincide y agrega que su lectura es que estas marcas son conscientes de que el consumidor, gracias a las redes sociales, tiene más poder del que antes tenía:
“La gente ya está acostumbrada a castigar, a exponer, a señalar abiertamente lo que no le parece. En este caso tienes un montón de gente señalando cosas que son bien problemáticas y eso genera un precedente de que la presión que se estuvo haciendo tuvo un efecto en los medios y en las marcas y eso es algo que era impensable hace años en la televisión”.
No obstante, ¿cómo hacer para que lo ocurrido con las marcas y Adrián Marcelo sea la norma y no una posición acomodaticia?
“Todo mundo se pronuncia, todos publican comunicados, pero ¿y las instituciones que sancionan? ¿De verdad no hay forma de sancionar a un medio o a un personaje que hace estas declaraciones? Podemos seguir las activistas diciendo qué está mal, organizando boicots, pero ¿de verdad no entienden que no tenemos ganas de seguir gritando así?”, dice Alicia Leal, quien tiene una trayectoria en la defensa de las mujeres desde el activismo y la política.
“Quieren tapar el sol con un dedo: claro que es un tema de conflicto de intereses. Lo que vemos son marcas que quieren seguir vendiendo, televisoras que quieren seguir conservando clientes, autoridades que no quieren intervenir porque temen una represalia, y todo se vuelve un esgrima donde quien se me ponga en medio va a acabar picoteado y ensangrentado y va a ser una víctima más de este sistema en el que lo que importa es ganar, tener poder y tener capacidad de consumo”, señala Leal y en su reflexión detona preguntas que trascienden a este programa:
¿Qué harán las televisoras para dejar de reproducir por conveniencia o ignorancia discursos de ultraderecha que se gestan en internet y se anidan en la televisión?, ¿realmente están dispuestas las empresas a dejar de ganar dinero para promover una sociedad donde las mujeres vivan libres de violencia o sólo en los casos donde su imagen pública se vea dañada?
“Pueden haber muchos Adrián Marcelos y los hay y muchos son violadores y feminicidas en potencia. Como una bacteria, crecen y se vuelven empresarios, funcionarios y sostienen un sistema de creencias al que siguen arrojando aguas negras. Pero lo que no debemos olvidar es que toda esa mugre, si la seguimos vertiendo, a todos, tarde o temprano, nos va a tocar beberla”, cierra Leal.
GSC/ CMOG