El productor musical Jimmy Humilde dice sin una pizca de modestia que se considera el "padre" de la música urbana mexicana al impulsar una camada de jóvenes artistas como Fuerza Regida, Natanael Cano y Junior H, que han llevado a la fama mundial esta mezcla de corridos mexicanos con hip hop y rap estadounidenses.
"Hemos formado un carril para que ellos puedan caminar a gusto y hacer muchas cosas", expresó a EFE el dueño de Rancho Humilde, el sello discográfico que disparó este género a la cima de las listas de Billboard y Spotify, que hoy encabezan fenómenos globales nuevos como Peso Pluma.
"Somos los papás de los pollitos", subraya entre risas Humilde, de 43 años, hijo nacido en Los Ángeles de una ama de casa y un panadero, ambos del estado mexicano de Michoacán.
"Nosotros fuimos los que inventamos el sonido y que trajimos el sonido nuevo a la industria mexicana, y todo eso fue porque sentíamos que estábamos perdiendo la esencia de la cultura mexicana en Estados Unidos", expresa.
El empresario confiesa sentirse "bendecido" por el respeto que ha cultivado entre estas generaciones binacionales musicales y por el éxito mundial de esta mezcla, que parte de una cultura de la calle universal y sin las barreras del idioma.
Sostiene que los corridos urbanos son número uno en México, Suramérica y otros lugares a donde están llegando, como también entre los latinos de Estados Unidos, y atribuye el éxito a que los "mexicanos somos chingones".
"Estábamos buscando la manera de cómo identificarnos con un tipo de música que iba a ser entendido por el estadounidensemexicano. Entonces decidimos empezar este tipo de música, encontrar artistas que creíamos que eran parte de este movimiento que estamos creando", indica.
Humilde se refiere a jóvenes artistas que además dominan las redes sociales como Legado 7, Arsenal Efectivo, Herencia de Patrones, Fuerza Regida, El de la Guitarra, Eslabón Armado y Junior H, entre otros, y que colaboran con artistas como Bad Bunny, como es el caso de Natanael Cano.
Sobre estos ritmos urbanos, que han tomado varios nombres como corridos tumbados, verdes, de la calle, bélicos, o alterados, dice que todos son lo mismo, con la esencia del corrido que, aclara, no es un género, ni una balada, sino "una historia, un estilo de vida".
Desde la época de Rosalino "Chalino" Sánchez (1960-1992), Humilde dice que ha sido seguidor 50 % de los corridos y el otro 50 % del hip hop y rap, los cuales considera, más que ritmos, estilos de vida, de vestir de actuar.
"Yo pienso que lo de hoy en día es una mezcla de los dos tipos de vidas", indica.
El dueño de Rancho Humilde, que empezó en 2008 como una empresa de fiestas clandestinas en Los Ángeles, cuenta que de joven dejó los estudios a los 17 años y comenzó como asistente del rapero Jessie Morales, "El Original de la Sierra", "planchándole la ropa, dándole de comer... todo eso".
Explica que entre los impulsores de la música urbana mexicana están Fuerza Regida, Natanael Cano y Junior H, y que los nuevos artistas "vienen saliendo de la escuela de ellos, del estilo de ellos".
Los tres, sin embargo, tienen diferencias marcadas. Fuerza Regida es calle, es barrio, es ranchero, expresa su identidad "con el ser mexicano y multicultural, estadounidense", subraya.
A Natanael Cano lo considera un niño rebelde que "cree en él, que creó su música, creó su estilo de vida y no le importó lo que está a la derecha, a la izquierda o al frente o atrás; simplemente siempre fue Natanael Cano, es único".
A Junior H lo describe como "un gran corazón y (que) se sabe identificar con todo tipo género del ser mexicano". El artista se ha destacado por su música de baladas, que llama "Sad Boyz 4 Life", pero también canta corridos, precisa.
Humilde se mostró además feliz de la apertura, el fin de semana pasado, de la nueva sede de su sello discográfico, que ofrece además de la producción musical y de videos, series y películas, también la de pódcast y todo lo que los artistas necesitan en un solo lugar.
El productor musical, quien lidera también una fundación que enseña y ayuda a jóvenes en Los Ángeles a encontrar su pasión por la música, dice que su aspiración es seguir "laborando con diferentes sonidos, dándole al barrio en las calles lo que está pidiendo".
jk