Dan último adiós al joven fotógrafo Felipe, 'El Nómada en Patineta' en Puebla

La promesa de la fotografía pidió como su última voluntad que todos sus órganos y tejidos fueran donados, para mejorar la calidad de vida de otras personas.

Despiden a Felipe, 'El Nómada en Patineta' | Andrés Lobato
Puebla /

Tal como los grandes rockstars, El Nómada en Patineta, como era conocido en redes sociales y por sus amigos el joven fotógrafo Felipe Pérez, dejó este plano material a unos días de cumplir 27 años; sin embargo, su corta edad no le impidió mostrar al mundo su gran talento en la fotografía, ya que logró ganar diversos premios y trabajar para instancias internacionales como la Fórmula 1.

Guardián del volcán, atento observador de la naturaleza, paciente, con gran tenacidad y con un amplio conocimiento en la técnica de la fotografía, Felipe logró capturar algunas de las imágenes icónicas del paisaje poblano de tiempos recientes, gracias a que sus postales se hicieron virales en redes sociales.

La ubicación de su pueblo natal hizo que Felipe amara a los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl; el contacto con la naturaleza y el senderismo fue casi natural y la fotografía fue la herramienta perfecta para capturar su belleza.

De los paisajes pasó a reportajes, a realizar documentales, a la fotografía de comida y a la social, todas ellos trabajos realizados con la misma dedicación y entusiasmo que los primeros retratos a Don Goyo, pero con un portafolio que crecía y crecía tanto en calidad como en cantidad.

Felipe participó en el Concurso Internacional de Fotografía, organizado por 35Awards, con el mayor número de jurados profesionales de 50 países del mundo, y obtuvo el segundo lugar en la categoría "Acciones Forestales", en el concurso Centinelas del Tiempo y Acciones Forestales 2019; y una mención Honorífica en la categoría "Árbol Urbano" en el concurso Centinelas del Tiempo y Acciones Forestales 2020.

Otro de sus logros fue que una de sus imágenes ganó el concurso México en una Imagen 2020; también fue uno de los 20 ganadores en el Tercer Concurso de Fotografía Terra Península 2021; uno de los 50 finalistas en el Festival de Fotografía Internacional de León y tercer lugar en el concurso México Momentos Felices, organizado por Canon Creators Latinoamérica

Para quienes lo conocieron, su partida es casi increíble, la noche del jueves 12 de enero sufrió un accidente que derivó en su fallecimiento el día sábado 14, una pérdida inesperada pero sin dolor.

Familiares, amigos y conocidos lo acompañaron en sus servicios de velación, para muchos de ellos fue difícil despedirse y asimilar la noticia de que ya no habría aventuras para fotografiar a Don Goyo, que no habría más crooked grinds en los rieles de Cholula por parte del Crook, como le apodaban sus camaradas de la patineta.

Además de su obra y el cariño que dio a quienes lo conocieron, El Nómada pidió como su última voluntad que todos sus órganos y tejidos fueran donados para poder mejorar la calidad de vida de muchas personas, siendo su caso la primera donación multiorgánica en Huejotzingo, Puebla, en este año.

Sus restos, acompañados en caravana por al menos un centenar de cercanos, llenaron las calles de San Nicolás de los Ranchos hasta llegar al templo principal de dicho municipio, donde con una iglesia abarrotada, el párroco de la región le dio la bendición y brindó palabras de aliento a sus familiares.

Al concluir la misa, las autoridades locales encabezadas por el presidente municipal Gumaro Sandre Popoca rindieron un sentido homenaje a quien con sus imágenes daba a conocer los atractivos y bellezas de su natal San Nicolás.

Entre aplausos, porras y trucos de skate, el cuerpo de Felipe recorrió por última vez por las calles que lo vieron crecer, para finalmente llegar a la fosa donde descansan sus restos.

La despedida fue difícil; entre música de mariachi, porras, el llanto de muchos, las voces al unísono coreando La Calle de las Sirenas, que era su canción favorita, llenaba de nostalgia y misticismo el ambiente.

Incluso, Don Goyo le dio un último adiós y lanzó una enorme fumarola al tiempo que las palas tiraban los primeros montones de tierra sobre su ataúd; así fue la despedida de esta joven promesa de la fotografía.

El Nómada en Patineta dejó literalmente una parte de él para que otros puedan disfrutar de la vida, al máximo, tal como lo hizo hasta sus últimos momentos en este plano material.


CHM

  • Alfredo Fernández

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