El municipio de Tampico busca ser puente entre los dueños de edificios históricos con inversionistas para su posible rescate, como el caso de éxito que representó la Casa Gándara, que está en proceso de rehabilitación para convertirse en museo y es probable que en 2026 esté listo.
Las obras de restauración en la casona, la cual data de 1865, están en este momento en su apogeo con personal que labora al interior y exterior del inmueble, el cual se encuentra en la esquina de las calles Carranza y Sor Juana Inés de la Cruz, a dos cuadras de la Presidencia y de la Catedral de Tampico.
Evangelina Alejandra Montalvo Rivero, directora de Desarrollo Urbano, aseguró que “desde hace tiempo tenían la intención de hacer la restauración e ingresaron ante el INAH la solicitud para poder intervenir el edificio, nosotros recibimos la notificación de visto bueno de parte del INAH y a partir de eso los trajeron toda la documentación para tener el permiso municipal”.
La Casa Gándara está en proceso de rehabilitación, ya va tomando forma, pero este año otro edificio histórico que está frente a los mercados también fue rescatado por empresarios, se volvió una cafetería que está exactamente frente a la plaza Hijas de Tampico.
Esos casos, reconoció la funcionaria, motivan a qué el municipio pueda definir esos edificios históricos con potencial de rescate, que si no es posible a través de los dueños, buscar a empresarios interesados en invertir en el rescate de los inmuebles, la mayoría ubicados en el corazón de la ciudad.
“Si el dueño no está en posibilidades de poder arreglarlo o intervenir, se va a buscar esos posibles empresarios, llegar directamente con los dueños para llegar a algún acuerdo, pero ya sería entre particulares, aquí nuestra labor será identificar, valorar y tratar de ser ese enlace en algún momento dado”, declaró la directora de Desarrollo Urbano.
Ese plan de acercamiento, expuso la funcionaria, sería una segunda etapa de las acciones del programa de Edificio Seguro que se está llevando a cabo en este momento, el cual se realiza con la ayuda de los expertos en ingeniería y arquitectura de la zona sur, con la finalidad de eliminar potenciales riesgos por desprendimientos.
Tan solo en el corazón de la ciudad está todo el patrimonio histórico que busca un rescate, en calles principales, esperando que haya interesados en su rescate para poder instalar algún negocio o hasta alguna oficina.
SJHN