Pese a tipificación con 4 años de cárcel, en Puebla continúa la violencia contra los abuelitos

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La OMS señala que de cada 10 personas adultas mayores, cinco a siete han sufrido violencia.

Pese a tipificación con 4 años de cárcel, continúa la violencia contra los ancianos | Andrés Lobato
Elvia García
Puebla /

Desde el pasado 3 de agosto de 2022, en Puebla se castiga con cuatro años y medio de prisión a quienes agredan física o psicológicamente a adultos mayores; sin embargo, un día después, en la ciudad capital se reportó que una anciana fue abandonada dentro de cajas de cartón, con cobijas y sin alimento en la colonia Joaquín Colombres.

En el marco del Día del Abuelo, a celebrarse el próximo 28 de agosto, la Dirección Jurídica del DIF municipal ha recibido 13 reportes de derechos vulnerados y violencia familiar contra adultos mayores este año. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada diez personas mayores ha sido víctima de malos tratos.

Al respecto, Dulce María Pérez Torres, psicóloga y socióloga de la Facultad de Psicología de la Upaep, detalló que la violencia física, psicológica, económica y sexual son el tipo de agresiones que más sufren los adultos mayores, donde la mayoría de los violentadores son la familia cercana, lo que hace imposible detectar los casos de maltrato.

Agregó que si bien en México las personas mayores forman parte del pilar de la familia, la OMS señala que de cada 10 personas adultas mayores, cinco a siete han sufrido violencia.

“Sufren violencia física, ya sea a través de un empujón, una caída, psicológica, al decirles que no son útiles, sexual, ya que en algunos casos son utilizados para relaciones sexuales, y económica; al ser adultos y no tener control de sus cuentas, sus familias les quitan su dinero”, expuso.

En entrevista con MILENIO Puebla, la especialista agregó que otro abuso que enfrentan los adultos mayores es la carga de trabajo de cuidar a nietos y bisnietos, lo cual se disfraza con apoyo familiar.

San Miguel Ixitlán, con más abuelitos

De acuerdo con el reporte del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) sobre el porcentaje de población de 65 años y más por entidad federativa, en Puebla pasó de 2010 al 6.4 por ciento a 7.8 por ciento en 2020. Además, 10 municipios poblanos concentran el mayor porcentaje de adultos mayores.

El municipio de San Miguel Ixitlán reporta el mayor porcentaje de población de ancianos con 26.8 por ciento del total de su población, seguido de Axutla, con 22.8 por ciento; en tercer peldaño Coyotepec, con 22.3 por ciento; en cuarta posición Totoltepec de Guerrero, con 21.7 por ciento; seguido de Teopantlán, con 21.5 por ciento.

En sexta posición se localiza Chila de la Sal, con 20.7 por ciento; seguido de Santa Catarina Tlaltempan, con 20.4 por ciento. En octavo lugar aparece el municipio de San Jerónimo Xayacatlán, con 19 por ciento; en noveno lugar Piaxtla, con 18.7 por ciento; y en el peldaño 10, con 18.4 por ciento, Xayacatlán de Bravo.

Mientras, los municipios con menor porcentaje de población de adultos mayores de 65 años y más son: Cuautlancingo, Amozoc, Cuapiaxtla de Madero, con 4.7 por ciento cada uno; seguido de Chignautla, con 4.8 por ciento, seguido de Acatzingo, con 4.9 por ciento.

Con 5 por ciento aparecen las demarcaciones de Santiago Miahuatlán y Ajalpan; con 5.2 por ciento cada uno, los municipios de Nopalucan y Atempan; y con 5.4 por ciento de población de adultos mayores de 65 años y más, la demarcación de Yehualtepec.

Aprueban reformas al Código Penal

El pasado 7 de julio de 2022, el Congreso local aprobó las reformas al artículo 355 del Código Penal del estado de Puebla, con la intención de tipificar la violencia psicológica contra menores de edad y adultos mayores; para ello, aumentó las sanciones para incentivar su protección.

La iniciativa presentada por las diputadas Ruth Zárate Domínguez y Mónica Rodríguez Della Vecchia modifica las penas, ya que actualmente este artículo señala un castigo de tres meses a tres años de prisión, así como una multa de 5 a 50 Unidades de Medida y Actualización (UMAS), la cual equivale a un monto de 481 a 4 mil 811 pesos, contra aquellos que agredan físicamente a sus padres e hijos.

La sanción se elevará hasta en una mitad, es decir, pasaría de cuatro meses a cuatro años y medio de cárcel cuando las víctimas sean menores o los progenitores sean adultos mayores, es decir, mayor de 70 años.

De acuerdo con la Ley de Protección a las Personas Adultas Mayores para el Estado de Puebla, los tipos de violencia contra este sector de la población son: "la violencia psicológica es cualquier acto u omisión que daño la estabilidad psicológica que puede consistir en negligencia, abandono, descuido reiterado, insultos, humillaciones, vejación, marginación, indiferencia, comparaciones destructivas, rechazo, restricción a la autodeterminación y amenazas, las cuales conllevan a la víctima a la depresión, al aislamiento, deteriorando su autoestima e incluso suicidio".

Como ejemplo de violencia contra adultos mayores, el pasado 4 de agosto, en la colonia Joaquín Colombres de la ciudad de Puebla, se reportó que una mujer adulta mayor fue abandonada en cajas de cartón en la vía pública. Personal del Sistema Municipal DIF acudió a la zona para proceder a la valoración y llevarla a sus instalaciones para su protección.

En tanto, la violencia física es cualquier acto que inflige daño no accidental, usando la fuerza física o algún tipo de arma u objeto que pueda provocar o no lesiones ya sean internas, externas o ambas. En este sentido, en Puebla en julio de 2021, un hecho de tránsito ocasionó que un anciano, de oficio taxista, fuera tirado al piso por un presunto doctor del Hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de La Margarita, en la capital de Puebla.

Asimismo, la violencia patrimonial es cualquier acto u omisión que afecte la supervivencia de la víctima. Se manifiesta en la transformación, sustracción, destrucción, retención o distracción de objetos, documentos personales, bienes y valores, derechos patrimoniales o recursos económicos destinados a satisfacer sus necesidades y puede abarcar los daños de bienes comunes o propios de la víctima.

Mientras, la violencia económica es toda la acción u omisión del agresor que afecta la supervivencia económica de la víctima, se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus percepciones económicas, así como percepción de un salario menor por igual trabajo.

De acuerdo con el DIF estatal, en la capital poblana se han reportado casos de mujeres ancianas a quienes les quitan el dinero que reciben de la Pensión del Bienestar, monto que equivale a 3 mil 850 pesos bimestrales.

Además, este sector también se enfrenta a la violencia sexual, que es cualquier acto que degrada o daña el cuerpo y sexualidad de la víctima y, por tanto, atenta contra su libertad, dignidad e integridad física.

Por último, la violencia institucional es todo acto u omisión efectuada por instituciones sean públicas, o privadas que brindan algún tipo de servicio a las personas adultas mayores.

En julio, en el Congreso local, la panista Mónica Rodríguez Della Vecchia presentó una iniciativa de reforma al Código Civil, que contempla no permitir el cobro de una herencia a una persona que haya violentado abusado, abandonado, o explotado a adultos mayores.

La iniciativa estipula una modificación al artículo 3 mil 79 del Código Civil del Estado de Puebla, para evitar que se cometa algún abuso físico o psicológico contra alguna persona anciana.

CHM

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