Era el año 2009 y se acercaba el tiempo de la tradicional celebración de la Virgen de Guadalupe en el barrio llamado “Las Brujas”, en el municipio de Gómez Palacio, donde suelen preparar el altar a la imagen de la Virgen, pintada por artistas urbanos que en cada oportunidad le aplican algo de tinta.
Una mañana a finales de octubre del mismo año, tres personas que se encontraban frente al altar ubicado sobre la calle Patoni en la colonia Jaramillo, fueron atacados a tiros por un grupo armado hasta quitarles la vida, mientras realizaban la limpieza de la imagen guadalupana.
Este hecho conmocionó a los vecinos ya que la imagen había sido alcanzada por las balas y esquirlas de alrededor de 150 casquillos percutidos encontrados por el Ministerio Público.
Trascendió que arribaron camionetas con hombres armados y abrieron fuego contra los que se encontraban limpiando el lugar, como preparación hacia el día 12 de diciembre. La imagen de la Virgen de Guadalupe del barrio de Las Brujas, curiosamente tenía la mirada baja, fija hacia donde los peritos forenses levantaban uno de los cuerpos que quedaron frente al altar, que actualmente tiene añadidos los nombres de los integrantes del barrio que ya no están.
En ese tiempo la inseguridad en el país era el pan de cada día, tal como sucedía en este sector que colinda entre la colonia Santa Rosa y la Tierra Blanca. Una de las vecinas, la señora Sonia Barrios, recuerda muy bien aquel día, a pesar de que cada 15 días o un mes, había situaciones violentas en la colonia, donde presuntamente había un punto de venta de drogas.
Como evidencia de lo acontecido frente a los ojos de la Virgen de Guadalupe, la señora Sonia aún guarda en físico el periódico Express, donde las fotografías muestran de fondo a la imagen mariana que resultó afectada al recibir parte de los disparos.
“La virgen del barrio Las Brujas fue testigo del asesinato de tres hombres y hasta le tocaron balas a la imagen. Eran tiempos muy violentos y así como atestiguó que mataron a esos tres hombres cuando arreglaban su altar, también vio como se fueron varios del barrio por la violencia”, compartió.
Sonia tiene 30 años viviendo en la colonia Jaramillo y recuerda que desde entonces ya se realizaba una celebración a la ‘Virgen Morena’, que al igual que este año con pandemia, en el 2009 fue diferente. Uno de los escasos integrantes del barrio, que decidió omitir su nombre, compartió que cada madrugada del 11 de diciembre resultaba toda una fiesta, en la que las danzas amenizan mientras todos velan a la virgen durante la madrugada, para continuar el 12 de diciembre con el rosario y la ofrenda de reliquia.
Por su parte, la familia de la señora Lidia es la que se encarga de organizar año con año las actividades, sin embargo, en esta ocasión, la pandemia por el covid-19 retrasó los planes y no se logró realizar la celebración ante las restricciones sanitarias, que al igual que aquel 2009, no se llevará a cabo tal celebración como esperaban.
En tanto, el barrio Las Brujas lo que sí celebran es que ya no prevalece la violencia en el sector, además ya esperan a que el próximo año la situación con la pandemia mejore y se pueda retomar la tradición de velar a la virgen y ofrecer el platillo de la reliquia.
EGO