Si algo abunda en la colonia Condesa —además de bares—, son cafés, pero muy pocos pueden compararse con Frëims. Este lugar no sólo tiene una amplia variedad de café de alta calidad, sino que también es hogar de los ya famosos sándwiches de waffle, tienen una carta de coctelería a base de café y una terraza que resulta un oasis de tranquilidad en pleno corazón de aquella popular colonia.
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Empecemos por lo primero: su café. Aquí encontrarás siete maneras diferentes de tomar una buena taza de café: desde la ya tradicional prensa francesa, pasando por el método de goteo y hasta el sifón japonés o la torre fría que te asegurará una experiencia gustativa muy diferente y superior.
Sus waffles son los que lo hicieron famoso hace ya algunos años cuando tenía un pequeño local en la colonia Roma. Su dueño, Marcos Galante, cuenta que fue la solución que encontró cuando buscaba ofrecer un tipo de alimento que no necesitará gas, pues ése había sido el acuerdo con los vecinos.
Ahora, puedes encontrar platos tanto dulces como salados a base de este peculiar pan. Por ejemplo, el mítico sándwich BLT cuadriculado que, como su nombre lo dice, tiene lechuga, jitomate y tocino —horneado y bañado en maple— entre dos waffles salados; si vas con ganas de comer, te recomendamos las albóndigas que están acompañadas con un waffle de parmesano.
Pero como sucede en casi todos los lugares, guardan lo mejor para el final. En su carta de postres puedes encontrar waffles preparados de diferentes maneras, ya que hasta uno de carajillo tienen. Y la panacota de manzanilla es para ti si quieres un sabor mucho más delicado para acompañar tu cóctel a base de café que puede estar hecho con café verde, cáscara, cold brew o un shot de espresso.
La terraza es algo que merece una mención a parte. Como bien dice Marcos Galante, Frëims es un lugar para ser descubierto. Y es que sobre la calle de Ámsterdam apenas hay una pequeña entrada a un cuarto blanco. Como si fuera tímido se esconde entre grandes edificios, tiendas de ropa y lentes y varios restaurantes.
Pero al entrar, no sólo te llevas una sorpresa al ver su selección de vinilos a la venta o de su peculiar biblioteca. Si caminas un poco al fondo, verás una espaciosa terraza que invita a cualquiera a pasar un buen rato leyendo, escribiendo o simplemente para estar con amigos. Por lo que no resulta curioso que también sirva como foro de conciertos.
Visitar, más bien, encontrar este lugar en la Condesa es de esas joyitas que aún le quedan a esta colonia que poco a poco mutó hasta convertirse en el lugar para fiestar.
Dónde: Avenida Ámsterdam 62B
Precio: promedio por persona 250 pesos
RL