Tras el encuentro entre Chivas y América en el Clausurs 2024, el delantero Julián Quiñones hizo un polémico gesto hacia los aficionados del Rebaño Sagrado, lo que aumentó la polémica del Clásico después el empate sin goles.
Cuando el árbitro Fernándo Hernández dio el silbatazo final, los jugadores del América y de las Chivas se reunieron en medio campo y agradecieron a sus respectivas aficiones. Después, se dispusieron a ir a los vestidores.
Cuando el cuadro azulcrema caminaba hacia el tunel de los vestuarios, comenzaron a sonar chiflidos e insultos hacia los futbolistas. En ese instante, Julián Quiñones levantó la mirada hacia las gradas del Estadio Akron e hizo un gesto en tono de burla.
Quiñones juntó sus manos a la altura de su pecho y los empezó a mover como si estuviera cargando a un bebé. Esta acción fue interpretada como si le dijera a los aficionados de Chivas que son sus "hijos".
Después de esto, al seleccionado mexicano le cayó líquido proveniente de las gradas, por lo que solo se limitó a sonreir y saludar al cuerpo técnico del América.
El Clásico Nacional culminó en un empate sin goles en la fecha 12 de la Liga MX. Con este resultado el América llega a 25 puntos y es el segundo lugar; mientras que las Chivas salieron de los puestos de play-in al ubicarse en el puesto 11.
RGS