El gobierno francés aprobó hoy un proyecto de ley que instaura un estado de emergencia sanitaria con el que poder legislar por decreto para responder con rapidez a la crisis provocada por el coronavirus.
El primer ministro, Édouard Philippe, indicó que no se trata de pronunciar "medidas individuales restrictivas", sino de poder adoptar las disposiciones necesarias para afrontar la epidemia, que en Francia ha provocado ya 175 muertes y más de 7 mil 700 casos de contagio.
Ese estado de emergencia, en vigor de ya y durante los próximos 12 días, fue declarado en el Consejo de Ministros y el Ejecutivo presentará su contenido de inmediato a la Asamblea Nacional y al Senado.
El gobierno sigue el modelo instaurado tras los atentados de 2015, cuando se declaró igualmente un estado de emergencia, en ese caso terrorista y que entre otros puntos ampliaba la asignación del régimen de residencia vigilada a personas cuyo comportamiento o compañías se presentaran como una amenaza para la seguridad pública.
Este nuevo proyecto de ley y otros dos de carácter económico también adoptados este miércoles, enmarcan jurídicamente las medidas ya anunciadas tanto por el presidente, Emmanuel Macron, como por el Ejecutivo en respuesta a esta crisis.
Entre ellas, un paquete económico que incluye garantías de préstamos a las empresas por valor de 300 mil millones de euros para que estas puedan mantener su tesorería o el aplazamiento para las compañías pequeñas del pago de la electricidad y el gas.
La comparecencia de Philippe sirvió también para confirmar la intención del Ejecutivo de que la segunda ronda de las elecciones municipales, que debía celebrarse este 22 de marzo pero fue suspendida por razones sanitarias, tenga lugar en junio si la evolución de la situación lo permite.
"Francia atraviesa una crisis sanitaria sin precedentes en un siglo y necesita medidas fuertes para gestionarla", dijo el primer ministro, que explicó que su objetivo es tanto proteger a la población como al tejido económico.
jamj