Debido los estragos que la pandemia del coronavirus está teniendo en las finanzas de particulares y empresas, tres de los principales bancos estadunidenses apartaron unos 30 mil millones de dólares en el segundo trimestre del año para cubrir deudas y podrían estar en riesgo de quedarse sin pagar.
Las cifras difundidas por JPMorgan Chase, Wells Fargo y Citigroup ofrecen el vistazo quizás más preciso hasta ahora del impacto que la pandemia ha tenido en el sistema financiero.
Ejecutivos bancarios, en teleconferencias con analistas y reporteros, admitieron que subestimaron la duración de la pandemia y su impacto total en la economía.
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Debido en gran parte a la designación de esos fondos, las ganancias de JPMorgan cayeron por la mitad en el período abril-junio, las de Citigroup bajaron en un 70 por ciento y Wells Fargo reportó su primera pérdida trimestral desde la crisis financiera del 2008.
En abril, muchos economistas coincidían en que la economía estadunidense protagonizaría un gráfico en forma de V, es decir, una abrupta caída debido a la pérdida de empleos y al cierre de negocios, seguida por una rápida recuperación a la normalidad.
Tales vaticinios resultaron ser excesivamente optimistas.
La pandemia ha entrado en su quinto mes en Estados Unidos y las infecciones están marcando récords en Florida, Texas y California, lo que ha llevado a las autoridades allí a volver a cerrar parcialmente sus economías. El rescate económico aprobado en Washington en abril está a punto de vencer. Un programa de subsidio a desempleados vencerá a fines de este mes a menos que el Congreso prorrogue su vigencia, y muchos consumidores llevan meses sin poder pagar sus deudas.
Los ejecutivos bancarios ahora anticipan que la crisis continuará por varios meses más. La reapertura de las economías en algunos estados ha provocado un resurgimiento del virus. California, el estado más poblado del país, canceló varias medidas de reapertura el lunes ante el aumento de infecciones, hospitalizaciones y decesos.
El mes pasado, la Reserva Federal pidió a los bancos tomar precauciones ante la posibilidad de otra recesión con recaídas a fines del verano e inicios del otoño.
"La pandemia tiene por el cuello a la economía estadunidense y al parecer la situación no va a mejorar hasta que produzcan una vacuna", estimó Michael Corbat, director general de Citigroup, en una teleconferencia con inversionistas.
srgs