Durante una charla organizada por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), Alicia Bárcena, urgió a México a realizar una reforma fiscal a fin de dotar al Estado de beneficios ampliando el espacio fiscal y las recaudaciones.
“Es necesaria una reforma tributaria progresista; es decir, que no es equivalente a aumentar los impuestos. Aunque México no la quiera y yo lo entiendo, pero es necesaria y es urgente porque la tributación y la fiscalidad, es el instrumento por excelencia del Estado, y el Estado es lo que necesitamos fortalecer en este momento”, destacó.
La desigualdad de género, de regiones y de ingresos ha sido una problemática que la crisis por coronavirus ha dejado al descubierto en México y en distintos países de América Latina, es por esto que expertas en económica coincidieron en que es necesario poner la igualdad en el centro del desarrollo para cerrar las asimetrías económicas y sociales.
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“Necesitamos también un pacto social y político en donde el Estado, el mercado y la sociedad puedan establecer nuevas reglas del juego y nuevas formas de convivencia, pero es el Estado el que debe fortalecerse primero, que ha sido muy desmantelado en los que se ha mercantilizado la salud y esta crisis evidencia estas brechas”, dijo.
En este sentido, Graciela Márquez, secretaria de Economía, coincidió en la idea de incrementar el Estado a fin de terminar con la “penuria financiera del Estado Mexicano” que se trata de un problema estructural que México debe resolver.
“México recauda poco, recauda mal y genera privilegios. Ahí hay uno de estos problemas estructurales que hay que resolver. Pero también necesitamos más Estado para la igualdad, no podemos construir la igualdad sin más estado, eso es claro y el mercado no tiene una potencia generadora de igualdad, es el Estado el que la genera y que piense en las múltiples dimensiones de la desigualdad.”, indicó.
“Se decía que no había dinero, que la consolidación fiscal y que la manga del muerto, ahora resulta que si hay y que los países si pueden invertir y sí puede haber expansión fiscal. Lo preocupante es que después de la pandemia quieran llevar nuevamente al ajuste y a la austeridad, la austeridad lleva a la recesión”, enfatizó.
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Márquez dijo que actualmente se vive una contingencia económica y sanitaria con sesgo de género en el que las mujeres tienen una alta exposición al coronavirus, al estar incluidas en sectores económicos como el de la salud o el informal, en el que representan la mitad de la fuerza laboral y que no paró actividades durante la contingencia sanitaria.
Bárcena insistió en que la igualdad debe ser vista como un potente motor del crecimiento, “igualar para crecer”, por lo que debe estar orientada a la satisfacción de bienes básicos y programas de acceso universal a la salud, al agua y a los bienes básicos, lo que requiere un pacto social y político, en donde el Estado, el mercado y la sociedad puedan establecer nuevas reglas del juego y de convivencia.
“Necesitamos un pacto y un Estado que reconozcan abiertamente la desigualdad. Hoy en México existe el reconocimiento de la desigualdad regional en el énfasis de la inversión en la zona del Sur y Sureste, pero existe la desigualdad de género, de ingreso y tenemos que conjuntar las dimensiones y crear un sistema de respuesta”, explicó.
Alicia Bárcena concluyó en que el coronavirus reveló un transfondo ideológico y económico que se movió a raíz de la pandemia, por lo que se debe hacer un ajuste a las instituciones con el cambio del paradigma que ha dejado la crisis económica y sanitaria.
srgs