Dolor de cabeza, gastritis, colitis, son algunos de los malestares físicos causados por estrés financiero, sin embargo, no todas las personas prestan atención a éste, e incluso hay quienes no logran percibir qué tan grave es su situación económica.
La preocupación constante sobre los gatos que necesita realizar una persona, el pagar o adelantar deudas, y el cómo hacer frente a los compromisos del día a día, tienen un nivel de estrés que puede ser medible: alto, moderado, bajo o nulo.
EL DATO¿Qué es el estrés financiero?
Se trata de una preocupación o ansiedad ante una situación financiera que se vuelve difícil o que genera cierta incertidumbre, y este estrés se puede ver reflejado en afectaciones fisiológicas, psicológicas y en las relaciones que tenemos con otras personas. Fuente: Inegi
En entrevista con MILENIO, el profesor de Economía en el Tecnológico de Monterrey, campus Santa Fe, Ángel Iván Olvera, refiere la Encuesta Nacional sobre Salud Financiera (ENSAFI), que se levantó por primera vez en 2023, identifica el nivel de estrés que tiene la población mexicana de 18 años y más.
La ENSAFI atribuye una calificación al estrés financiero de las personas, en donde mientras más grande sea el valor del estrés financiero, las personas viven un mayor malestar y, la calificación que promedio a nivel nacional es de 59.5 puntos.
"El 36.9 por ciento de la población reportó que tiene un nivel alto de estrés financiero, es decir, 37 de cada 100 adultos tiene un alto estrés financiero", detalló.
En tanto, 34.6 por ciento mencionó que su estrés era moderado y sólo 28 por ciento reportó que su nivel era bajo a nulo.
De acuerdo con el especialista, “si juntamos la población con un alto estrés financiero con el nivel de estrés financiero moderado”, este representa a 71. 5 por ciento de la población de 18 años.
Además, las personas con mayor nivel de estrés financiero oscilan entre 30 y 64 años, una etapa productiva de las personas en la que más se pregunta sobre si el dinero va a alcanzar, sobre si se debe o no pedir una deuda.
En las entidades donde se sufre un mayor nivel de estrés financiero, tiene relación con el número de habitantes, como son:
- Ciudad de México
- Zacatecas
- Baja California
En tanto, las entidades con menor estrés financiero son:
- Nuevo León
- Quintana Roo
- Tamaulipas
En lo individual, de acuerdo con el especialista, las personas auto perciben un estrés financiero menor al registrado por el Inegi, de 44.6 puntos.
Pero en lo que sí coinciden tanto Inegi como la Condusef es que las mujeres son quienes padecen un mayor estrés financiero respecto a los hombres.
Además, mientras más hijos se tienen el nivel de estrés financiero de las personas aumenta al igual que la autopercepción.
“Mientras que en el indicador las mujeres tendrán una calificación de 62.5 (puntos), los hombres tendrán de 56 puntos”, destacó.
En el nivel de autopercepción sobre estrés financiero, las mujeres tienen un nivel de 50.9 y los hombres de 45.9, pero cómo identificar en qué posición te encuentras, existen preguntas que pueden ayudar a respondértelo.
Seis preguntas para identificar el nivel de estrés financiero:
- ¿Cuál es la preocupación que puedo tener por pedir un préstamo a partir del recurso que tengo?
- ¿Me alcanza para vivir al nivel de vida que quiero vivir o que puedo vivir?
- ¿Cuál es la preocupación que me da gastar más de lo que tenía planeado?
- ¿Cuál sería mi proporción de que las deudas se acumularan o que se vayan acumulando a través del tiempo?
- El dinero es insuficiente para actividades de ocio, para actividades de entretenimiento.
- ¿Qué tanto me estresa el no poder gastar en otras actividades que me generen una tranquilidad o un despeje social o que me salga, que me saque de mis actividades rutinarias?
Consejos para salir del estrés financiero
Uno. Hacer un presupuesto. Te ayuda a identificar cuánto puedes gastar, cómo puedes gastar y cada cuánto puedes gastar.
“A partir de esto por ejemplo podemos identificar temporadas donde es bueno consumir algunos productos u otros, porque ya sabemos que durante el año va a haber ciertas promociones…es algo complejo…que si nos va a llevar tiempo, pero es lo que nos ayuda a tener una mejor salud financiera”, expresó el especialista del Tec de Monterrey.
Dos. Ahorrar. Se trata del dinero que vas a guardar o apartar del resto y que se debe considerar desde el presupuesto, puede ser un uno por ciento de forma inicial, a lo mejor porque tienes deudas, pero es un comienzo, para luego en la medida de lo posible aumentarlo.
“El 53.2 por ciento de la población, de acuerdo al ENSAFI, realiza algún tipo de registro o control de gastos, pero sólo 32.8 por ciento cumple el registro de subgasto. Entonces, no solamente es hacer el presupuesto, es darle seguimiento”, finalizó.
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MRA