El 1 de junio los comercios de Tula de Allende reiniciarán operaciones bajo estrictas medidas sanitarias y con horarios específicos, según acordaron autoridades municipales y comerciantes tras una protesta realizada la mañana del martes en la alcaldía.
Locatarios se concentraron en la explanada del palacio municipal para solicitar la reapertura de sus establecimientos, luego de más de un mes de operaciones suspendidas en establecimientos no esenciales por la contingencia sanitaria del nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
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Los comerciantes señalaron que registran severas afectaciones económicas por el cierre forzado establecimientos, además de señalar que no han recibido apoyo gubernamental en despensas o créditos que les permita sortear la situación.
Manifestaron estar conscientes de las medidas sanitarias requeridas, por lo que se comprometieron a aplicarlas para evitar contagios del nuevo coronavirus en caso de permitir la reapertura de negocios.
No obstante insistieron en que es indispensable que les permitan operar con el fin de mejorar su situación económica tras la parálisis de gran parte de la actividad comercial.
Luego de dialogar con las autoridades municipales acordaron que el próximo lunes 1 de junio todos los establecimientos reabrirán, aunque habrá constantes revisiones de parte de la alcaldía para vigilar que los locatarios cumplan con las medidas sanitarias y los horarios, de lo contrario el establecimiento será sancionado con la clausura.
Pero además se hará una revisión epidemiológica, y en caso de que incremente considerablemente el número de contagios o decesos, se revisará el acuerdo para suspender de nuevo las operaciones a fin de evitar el colapso de la infraestructura hospitalaria.