Hoy, el ámbito abogadil no valora o reconoce en Miguel, una contribución -mínima- al canon de la teoría y práctica del derecho en general o del judicial en particular.
Miguel es y siempre ha sido un político con un refinamiento excelso para simular distintos papeles a lo largo de su carrera; por ello, esta pregunta es pertinente: ¿quién recuerda en Saltillo o en Torreón, alguna aportación significativa -no maquillada por pago a medios de comunicación o redes sociales (el cual fluye generoso, me dicen distintas voces del poder judicial local)- que Mery haya realizado en las distintas posiciones políticas que ha tenido? Sepulcral silencio.
Lanzo la pregunta de manera distinta: ¿por qué es o será recordado Miguel en esas dos ciudades?
El silencio sepulcral es roto por una vocecilla tímida que con acento lagunero pregunta: “¿Estaría el salario acumulado de Mery por los distintos tipos de trabajo público que ha realizado en sintonía exacta con su estilo de vida y las propiedades acumuladas a lo largo de su trayectoria?”
Miguel ha tenido en su carrera política la suerte del personaje de “Forrest Gump” representado por Tom Hanks, quien, en las situaciones más peliagudas, siempre terminaba por tocar la flauta sin desafinar.
Aunque Forrest, justo es decirlo, al contrario de Mery, siempre mostró mérito a partir de su esfuerzo, una dignidad ética a toda prueba y una transparencia irrebatible.
Ante su inminente derrota para reelegirse como Magistrado, porque Miguel ha perdido todas las elecciones en las cuales ha participado, ya filtró en una columna política, que sí no le va bien en su intentona por reelegirse, podría competir y ganar la alcaldía de Torreón en 2027.
Al caer la noticia en su ciudad, de manera espontánea, empezó una colecta entre cientos de torreonenses para pagar a los saltillenses la adopción definitiva de Mery, con pasaporte sarapero y las llaves, aunque sean de circonio, de la ciudad, incluidas.
Este movimiento que empieza a crecer de manera insospechada lleva por nombre: “¡Cámate Miguel Mery Po´Favó!”.
canekvin@prodigy.net.mx