Las fuerzas estatales y federales de seguridad han recibido siete ataques directos en lo que va del año, que han dejado tres policías heridos y 11 civiles muertos, uno de ellos ajeno a los hechos y un herido.
El primer encontronazo entre delincuentes y la Policía Estatal se registró comenzando el año, el 3 de enero, en el cual los elementos fueron emboscados en el poblado Los Guerra en el municipio de Miguel Alemán.
Ahí resultaron tres policías heridos, entre ellos un mando, sin embargo no tuvieron bajas.
Pocos días después se registró otra balacera, el 12 de enero, que dejó como saldo cuatro muertos, en un enfrentamiento entre civiles armados y elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Reportes señalan que los hechos ocurrieron en la tarde del lunes, cuando elementos de la Sedena patrullaban la zona de la carretera Anáhuac. Se escucharon detonaciones de arma de fuego y se produjo una persecución.
Otro fuerte encuentro se registró el 14 de febrero, esta vez integrantes del cártel del noreste se enfrentaron a los de la guardia nacional, se hizo una persecución y los delincuentes chocaron contra una camioneta, así provocaron la muerte de una mujer de 68 años.
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El 26 de abril una balacera entre hombres armados y militares, en el municipio de Díaz Ordaz duró por lo menos media hora, misma que dejó tres civiles muertos y 6 detenidos.
Un mes más tarde, el 27 de mayo, se registró otro enfrentamiento armado en Nuevo Laredo, que prácticamente paralizó a la ciudad, pues civiles armados, presuntamente del Cartel del Noreste, trataron de emboscar a elementos de la Sedena sobre la avenida que lleva al aeropuerto.
Ahí varios vehículos fueron alcanzados por proyectiles de arma de fuego, mientras que un hombre ajeno a las hechos resultó con una lesión en la pierna.
Cuatro días después, el 31 de mayo, el municipio de Reynosa tarde se convirtió en un campo de guerra, video de que hombres armados atacaron a los policías estatales mientras hacían labores de vigilancia, en el que no hubo detenidos, lesionados o muertos.
El último ataque se perpetró el primero de julio, donde hubo varios enfrentamientos en el municipio de Nuevo Laredo, entre hombres armados que portaban uniformes apócrifos de la Sedena y militares. El encontronazo presuntamente dejó tres delincuentes muertos.