El pasado 6 de agosto, un perro ingresó a las instalaciones del servicio Médico forense del municipio de Lagos de Moreno, y se tragó parte de un cadáver al que se le estaba practicando la autopsia.
El perro escapó del anfiteatro llevándose un pedazo de carne en el hocico, este hecho propició que hoy domingo 1 de septiembre, el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses emitir un boletín para informar del inicio de una investigación.
"El Órgano de Control Interno del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) abrió procesos administrativos e inició una investigación al Delegado Regional en Lagos de Moreno y a la Perito A, luego de que durante la madrugada del 6 de agosto se registrara el ingreso de un perro a las instalaciones, específicamente al anfiteatro, y tuviera contacto con un cuerpo”, se lee en el texto informativo.
Como consecuencia de este hecho se inició con las investigaciones correspondientes para deslindar responsabilidades, ya que se presume la omisión al no cerrar de forma adecuada los accesos del edificio, que si bien es cierto, el sistema de cerradura electrónico no funciona, sí es posible asegurar las puertas de forma manual.
Además, se acreditó el mal manejo del cuerpo, al tenerlo fuera de la cámara de refrigeración y se documentó la realización irregular de la necropsia, lo que representa una práctica contraria a lo que establece el protocolo.
Por el momento, el Delegado fue acreedor a una amonestación, mientras que la Perito A fue separada de su cargo, en tanto concluyen las investigaciones y se agote el proceso de desahogo de pruebas.
Fuentes consultadas por Milenio aseguraron que el anfiteatro el municipio Lagos de Moreno carece de vigilancia, lo que facilitó el ingreso del can a las instalaciones.
MC