La ‘segunda vida’ de Miguel “N” pasó desapercibida ante los ojos de seis titularidades de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCdMx), y con ello los presuntos feminicidios de al menos seis mujeres desde el 2012.
María José fue la última de sus víctimas: una joven de 17 años que habitaba en el mismo condominio de departamentos que su presunto agresor, ubicado en la colonia Santa Cruz Coyuya en la alcaldía Iztacalco de la Ciudad de México (CdMx). Ahí donde el cruel asesinato de la adolescente destapó un nuevo caso de un posible feminicida serial.
La Fiscalía inculpa a Miguel “N” de supuestamente abusar sexualmente de María José para después golpearla hasta la muerte. Además del ataque perpetrado con un cuchillo contra la madre de la víctima, Cassandra, tras ser descubierto en flagrancia.
Pero la investigación por presunto feminicidio y tentativa de feminicidio era la ‘punta del iceberg’ de lo que se encontraba detrás de su departamento: cráneos humanos, restos en el refrigerador, sustancias químicas, identificaciones de mujeres y diversas herramientas.
Los indicios consternaron a la opinión pública, así como a las autoridades. Y si bien inicialmente trascendió que Miguel “N” había cobrado la víctima de dos decenas de víctimas, el Fiscal capitalino, Ulises Lara, informó que “podrían tratarse de siete casos: seis mortales y una tentativa de feminicidio”.
Frida Sofía, nueve años de incertidumbre
“Hoy por mí, mañana por tí”, decía un panfleto con cada una de las características de Frida Sofía y el cual comenzó a difundirse con la esperanza de volver a verla con vida.
La joven de 22 años viajó más de 100 kilómetros de su natal Tlacotepec, en Morelos, para estudiar la carrera de Administración Industrial en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) con la esperanza de ayudar al sustento de sus padres: “‘Ya cuando yo me gradúe’, me dice, ‘yo quiero que salgan acá’”, recordó su madre, Minerva, en pláticas con TELEDIARIO.
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El contacto con Frida se perdió en febrero del 2015, y la colonia Granjas, en Iztacalco, fue el lugar donde se le observó por última vez. Pero los años transcurrieron y la familia no obtuvo noticias de la joven desaparecida hasta nueve años después, el 16 de abril del 2024.
Y es que según Ulises Lara, autoridades han logrado acercarse con familias de cuatro víctimas de Miguel “N” para la confronta genética; siendo una de ellas la de Frida Sofía, de quien se sospecha que podría pertenecer uno de los cráneos hallados en el departamento cateado.
“Se dice en las noticias que fueron cinco (víctimas). Esperemos en Dios que ella esté ahí y que se haga justicia por todas las que ha matado”, declaró Minerva para TELEDIARIO, quien aguarda por los resultados de las pruebas que podrían, por fin, darle respuestas por el paradero de su hija desaparecida.
Familia de Frida Sofía espera resultados de los exámenes
La relación secreta de Claudia Andrea
Un recuento elaborado por MILENIO señala que Miguel “N” habría conocido a Claudia Andrea en el 2013, aunque después se alejó de ella tras ser encarado por el entonces novio de la joven— a quien conoció en la carrera de Químico Bacteriólogo Parasitólogo, también en el IPN.
“El novio le paró el alto a Miguel. Desde ahí como que se alejó y ya no se veían”, comentó a MILENIO el hermano de la víctima, José Ángel.
Pero unos años después las vidas de Miguel y Claudia volvieron a coincidir, empezando una relación amorosa. Un vínculo que habrían mantenido en secreto y del cual sólo la hija de la joven tenía conocimiento.
Días después de las fiestas navideñas, el 27 de diciembre del 2019, la fémina salió de su natal Morelos rumbo a un departamento que rentaba en la alcaldía Azcapotzalco, en la Ciudad de México. Debido a un intenso dolor de cabeza, Claudia se comunicó de manera rápida con sus familiares para informarles de su arribo, prometiéndoles volver a contactarlos. Algo que no ocurrió.
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Los familiares de Claudia intentaron comunicarse con ella sin éxito. Transcurrieron dos días de ello hasta que el 30 de diciembre José Ángel viajó a la capital para buscar a su hermana, a quien encontró muerta, envuelta en cobijas y sin ninguna de sus pertenencias como celular, o tarjetas bancarias.
Pese a los indicios, acusó José ante MILENIO, las autoridades calificaron como “una muerte natural” al feminicidio de Claudia, alegando un paro cardiorrespiratorio y sin una investigación de por medio. Ello, aunó, acompañado de hostilidades por parte del personal de la propia Fiscalía de la Ciudad de México.
“Me amenazó uno de la Fiscalía. No sé qué era, un comandante, creo que de la Policía de Inteligencia. Me amenazó. Hasta agarró su pistola y me dijo: ‘Aquí tú no vas a saber más que yo. Te estoy diciendo que fue muerte natural, ya no le rasques'".
Hermano de Claudia recuerda su relación con Miguel "N"
Las víctimas sin nombre
La Fiscalía de la ciudad imputa a Miguel “N” por seis feminicidios presuntamente perpetrados a lo largo de 12 años, entre ellos Frida Sofía, Claudia y María José, presuntamente. Sin embargo, no todas las víctimas han sido identificadas.
Según las investigaciones la primera víctima del “Feminicida de Iztacalco” se remontaría al 2012, quien aún se desconoce su identidad. Posteriormente vendría el asesinato de Frida Sofía en 2015, siendo éste el segundo.
El registro de la tercera víctima, también de identidad desconocida, data del 2018. La cuarta sería Claudia en 2019, y finalmente los últimos dos feminicidios habrían sido perpetrados en el 2024: el de María José en abril y otro más, del cual no se ha brindado fecha, ni identidad de la fémina.
“La policía de investigación ha podido corroborar que al menos cinco personas de quienes se localizó al menos una identificación en el lugar del cateo se encuentran con vida y en buen estado de salud”, atajó Ulises Lara el informe del caso el 25 de abril del 2024.
ASG