Tras más de dos décadas al frente del Cártel de Sinaloa, el pasado 25 de julio Ismael El Mayo Zambada salió de forma definitiva del juego luego de que fuera aprehendido junto a Joaquín Guzmán López en un aeropuerto privado de El Paso, Texas.
La inesperada detención del último capo de la vieja guardia ha traído consigo más preguntas que respuestas, así como un periodo de incertidumbre para todas aquellas células criminales que conformaban la facción del Señor del Sombrero.
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Dicho panorama ha orillado a analistas en seguridad y periodistas especializados en crimen organizado a presagiar una guerra interna en el Cártel de Sinaloa, el cual enfrentará un reacomodo en sus filas al perder a uno de sus principales líderes y fundadores.
Si bien al frente de la organización delictiva aún se encuentran los hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar -líderes de Los Chapitos-, así como Aureliano El Guano Guzmán Loera -hermano de El Chapo-, no es un secreto que El Mayo contaba también con un séquito de fieles seguidores que no dejarán tan fácilmente libre el camino para las otras facciones.
Los primeros indicios de la ‘narcoguerra’
En un reciente reportaje que el periodista especializado en crimen organizado, Óscar Balderas, realizó para MILENIO se retrata como la pugna entre grupos criminales pertenecientes al Cártel de Sinaloa ha iniciado en el estado fronterizo de Sonora.
De acuerdo con el citado comunicador, la ruta de Ciudad Obregón a Arizona en Estados Unidos fue controlada durante décadas por el Cártel de Sinaloa y sus aliados. No obstante, tras la captura definitiva y extradición de Joaquín Guzmán Loera, los grupos criminales que operaban en dicho corredor comenzaron a dividirse.
Pese a ello, el liderazgo que hasta hace dos semanas aún estaba en manos de Ismael Zambada García, permitía percibir unificadas a las diferentes células criminales que operaban para el Cártel de Sinaloa en la zona. Todo cambió aquel 25 de julio.
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Testimonios recabados en días recientes por Óscar Balderas dan cuenta de cómo la captura del septuagenario capo ha comenzado a tener consecuencias adversas para sus actividades delictivas, especialmente para el tráfico de personas.
Y es que, aunque desde hace años las personas migrantes ya pagaban una cuota a la organización delictiva para cruzar la frontera, ahora son diversos grupos criminales los que les exigen ese pago, dificultando y encareciendo aún más su anhelo por alcanzar el "Sueño Americano".
"Antes yo daba mi cooperación, lo que yo creyera justo. No hay lo que ahora que te exigen más de la mitad de lo que ganas. Y ahora se puso peor, porque antes ya sabías a quién pagarle, era una sola gente (grupo), pero ya cada uno te pide. Que si para mi jefe, que para el otro jefe, que para otro más", relató a Óscar Balderas un pollero del cruce fronterizo.
El tráfico de drogas es también una de las operaciones ilícitas del cártel que ha comenzado a verse afectada ante la disputa por la plaza que protagonizan al menos cinco células delictivas del Cártel de Sinaloa: Los Chapitos, Los Guanos, el Cártel de Caborca, Los Salazar y la gente de El Mayo Zambada.
Cada escisión de la organización delictiva cuenta con sus propios brazos armados. En el caso de Los Menores o La Chapiza -como también son conocidos en el hampa los hijos de El Chapo- son Los Pelones y Los Delta quienes conforman su ‘mini ejército’ de sicarios para disputar la plaza.
A Los Salazar también se les identificaba como una célula aliada de Los Chapitos en Sonora, sin embargo, la información que un agente de la Patrulla Fronteriza proporcionó al periodista Óscar Balderas actualmente los ubica como una escisión aparte que, además, cuenta con su propio brazo armado.
Dichas características vislumbran el poderío que la célula criminal ha acumulado con el paso de los años pues, de ser viejos aliados de Joaquín Guzmán Loera, tras la captura de El Mayo podrían buscar reclamar como propio el lucrativo negocio de tráfico de armas, migrantes y drogas que han operado durante décadas en Sonora.
¿Quiénes son Los Salazar?
El 8 de agosto de 2019, al interior de un restaurante de Hermosillo fue asesinado a balazos Sergio Alberto del Villar Suárez, mejor conocido como El Napoleón. Lo que en un inicio se pensó como un homicidio más de los que ocurren diariamente en el país, terminó por destapar un conflicto entre células delictivas que operan en Sonora.
El Napoleón fue despedido en medio de un cortejo de carros de lujos, múltiples y ostentosos arreglos florales así como música de banda sinaloense, bebidas alcohólicas y decenas de personas, según reportó MILENIO.
El llamativo evento fúnebre puso el foco en las dinámicas criminales que se perpetraron en la zona al confirmarse que Sergio Alberto del Villar Suárez no solo era el responsable de diversos ataques a periodistas sino que también era jefe de plaza de una violenta célula criminal: Los Salazar.
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De acuerdo con información de InSight Crime, fueron Adán y José Crispín Salazar Zamorano los encargados de fundar la violenta célula criminal que terminó trabajando para la que es considerada por el gobierno de Estados Unidos como una de las organizaciones de tráfico de drogas más poderosas del mundo.
Los hermanos, originarios de Chínipas en la sierra de Chihuahua, extendieron sus actividades delictivas a Sonora al menos desde la década de los 90's, cuando Don Adán llegó a Navojoa para participar en la producción y distribución de marihuana que era enviada por la frontera norte a Estados Unidos.
"Don Adán ingresó a la estructura del Cártel de Sinaloa como lugarteniente del entonces líder Joaquín Guzmán, alias El Chapo, junto a sus hijos Jesús Alfredo, alias El Muñeco y Adán, alias El Indio", describe en un informe la fundación dedicada al estudio de amenazas para la seguridad nacional de América Latina y el Caribe.
Fue así como el clan familiar comenzó no solo a involucrarse en las operaciones de contrabando del Cártel de Sinaloa sino también en las olas de violencia que azotaron a diversos municipios.
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"Desde las ciudades de Navojoa y Hermosillo mantienen el control de la ruta del narcotráfico que cruza por el norte del país, además de dominar el tráfico de migrantes por esa zona", señala en un análisis InSight Crime.
Información que Rubén Mosso reportó para MILENIO señaló que la Procuraduría General de la República (PGR) identificó a Jesús Alfredo Salazar Ramírez -El Indio- como el presunto responsable de la matanza de ocho personas en Creel, Chihuahua perpetrada en 2010.
A la célula delictiva también se le vinculó con homicidios de periodistas como el de Miroslava Breach Velducea en 2017 y el del activista Nepomuceno Moreno Núñez, el cual fue atribuido a Jesús Alfredo Salazar, alias El Muñeco.
Datos del gobierno de México citados por la fundación dedicada al estudio de amenazas para la seguridad nacional de América Latina y el Caribe apuntan a que la violencia que sembraron Los Salazar en el norte del país provocaron el desplazamiento forzado de por lo menos mil 200 personas en el municipio de Sonoyta, Sonora y de unas 300 familias en Chínipas, Chihuahua en 2015.
Según la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) Adán Salazar Zamorano solía moverse por todo México a bordo de aviones privados, además de que se le identificó como una de las pocas personas de confianza de Joaquín El Chapo Guzmán.
Las investigaciones de agencias estadounidenses resultaron suficientes para presentar una acusación en contra del líder de Los Salazar ante una corte federal del Distrito Oeste de Texas.
En 2011, Don Adán fue detenido e ingresado al Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) No. 5 Oriente en Villa Aldama Veracruz donde pesaban diversos procesos penales en su contra. Más de una década después, en agosto de 2023, la Fiscalía General de la República (FGR)concedió su extradición a Estados Unidos .
Tras la captura de su fundador, Los Salazar quedaron bajo el liderazgo de El Muñeco en 2012, luego de El Indio hasta su asesinato en 2016 y finalmente de Crispín Salazar Zamorano, hermano de Don Adán y quien, se presume, continúa encabezando la célula criminal que cada vez cobra más fuerza para independizarse de la que organización en la que años atrás se gestó: el Cártel de Sinaloa.
ATJ