El presidente Andrés Manuel López Obrador envió a la Cámara de Diputados una iniciativa para declarar 2024 como “Año de Felipe Carrillo Puerto, Benemérito del Proletariado”.
En su proyecto de decreto, el mandatario definió al político yucateco como defensor y pionero en la lucha por el reconocimiento de los derechos de los pueblos originarios, un incasable luchador social y mártir de la Revolución Mexicana.
Subrayó que los actos de quien fuera gobernador de Yucatán constituyen un legado que trasciende hasta nuestros días, pues fueron fundamentales para la evolución del Estado mexicano actual.
Propuso por ello declarar 2024 como “Año de Felipe Carrillo Puerto, Benemérito del Proletariado” e inscribir dicha frase en toda la documentación oficial del gobierno federal durante la vigencia del decreto.
La iniciativa presidencial prevé asimismo un programa de actividades para conmemorar la obra y labor de Carrillo Puerto en favor de la patria.
¿Quién fue Felipe Carrillo Puerto?
Felipe Carrillo Puerto nació en Motul, Yucatán, el 8 de noviembre de 1974, y fue un político y caudillo de la Revolución Mexicana.
En 1913 se unió a las filas del ejército encabezado por Emiliano Zapata, que para entonces se mantenía firme contra el usurpador Victoriano Huerta.
Posteriormente, en 1915, al enterarse de que el general Salvador Alvarado había puesto en marcha un amplio programa social en Yucatán, en el que destacaba el reparto agrario, se dirigió de vuelta a su estado natal y se puso a las órdenes del gobernador revolucionario, quien lo nombró miembro de la comisión agraria local.
Refundó y dirigió el Partido Socialista del Sureste y el 14 de diciembre de 1918 fue nombrado gobernador interino de Yucatán.
“Luego del triunfo del Plan de Agua Prieta y con Álvaro Obregón en el poder, Felipe Carrillo Puerto fue electo gobernador de Yucatán, en noviembre de 1921, para el periodo 1922 a 1926 (…). Su gestión como gobernador fue progresista en todos aspectos, otorgó todos los derechos políticos a la mujer para votar y ser votada, y estableció la revocación de los funcionarios de elección popular, cuando fuera solicitada por el pueblo”, detalla la exposición de la iniciativa.
Sin embargo, para 1923 Adolfo de la Huerta se levantó en armas contra el gobierno de Álvaro Obregón, por lo que Carrillo Puerto combatió esa rebelión, pero el movimiento huertista, con superioridad de fuerzas, obligó al gobernador de Yucatán a huir de la entidad.
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Carrillo Puerto fue detenido en Holbox, Quintana Roo, el 21 de diciembre de 1923, y llevado con sus acompañantes a la Penitenciaría Juárez de Mérida.
Fueron juzgados por un tribunal militar, que los condenó a la pena capital; el 3 de enero de 1924, junto a once personas más, entre ellas algunos de sus hermanos, fueron conducidos al panteón municipal, amarrados de las manos, donde fueron acribillados y saqueados de sus pertenencias.
Al enterarse de la ejecución, Obregón declaró que “el asesinato de Felipe Carrillo Puerto lleva pesar a las casas del proletariado y a muchos miles de seres humildes que, al recibir la noticia, sentirán lágrimas de dolor sincero deslizarse sobre sus mejillas”.
LP