Para el dirigente estatal del PRI, Néstor Camarillo Medina, se deben de cuidar los equilibrios en la definición de la alianza en Puebla con el PAN y PRD.
Incluso, advirtió que el tricolor no se dejará absorber como al PRD le pasó con el PAN, al dejar en claro que el PRI tiene vida propia, y cuadros propios.
Asegurando que en el Estado de México y Coahuila, el PRI aportó el por ciento de los votos totales de los dos estados.
No obstante, reconoció que el PAN es un aliado fuerte, que necesita del PRI, y el PAN y el PRI "necesitan a un PRD muy fuerte".
Por ello, detalló que tras el anuncio nacional de la alianza "Va Por México" que será el 26 de junio, se dará a conocer el método de la coalición para el candidato a la presidencia de la República y se prevé que luego baje para los Estados.
Por lo que ya comenzó a sentarse con las dirigencias estatales del PAN, y PRD, Augusta Díaz de Rivera y Carlos Martínez Amador, respectivamente.
Destacó que el PRI buscará tener mano en la gubernatura, presidencia municipal y diputaciones: "cualquier espacio, no nos hacemos chiquitos".
Del mismo modo, consideró que si en Morena se tiene varios adelantados, es porque vieron los focos rojos, ya que el PAN, PRD y PRI en alianza son más fuertes.
Lamentó lo sucedido en el Estado de México, donde el gobernador no fue entregado a su partido, sino a la oposición.
AAC