"Fui la ficha 190. Imagínese, sí había ya muchas personas antes que yo", dice el joven Francisco Javier mientras espera a que le entreguen el resultado de su prueba rápida de covid-19 en la explanada de la alcaldía Benito Juárez.
"¡Ficha 190!", grita entonces un hombre que sale de una carpa, vestido con un traje desechable, bata azul, cofia blanca, careta y mascarilla quirúrgica. "¿Ficha 190?", repite cuando Francisco Javier se acerca. "Positivo", dice escuetamente.
El rostro del joven se queda congelado unos segundos y no sabe qué decir. Pronto, recupera el habla. "No tenía tantos síntomas, pero es como digo, esto es más para prevenir porque aunque no vaya a fiestas, el virus está en cualquier lado, hasta trabajando uno...", dice el muchacho que vive en el Estado de México, pero que trabaja en la alcaldía Benito Juárez, de la Ciudad de México, en una pizzería.
"Tenía sospechas, ya sabe que en el trabajo, por esta temporada de Navidad, mucha gente se aglomera; primero, no sospechaba porque olía y todavía tenía gusto, pero desde que se me cerró un poco la garganta y empezó el fluido nasal ya tuve mis dudas", añade.
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Él es uno de los 500 pacientes que acudieron a hacerse una prueba covid a la alcaldía Benito Juárez, en donde, a diario, reparten ese número de fichas para que un laboratorio, que hizo un convenio con el gobierno de la alcaldía, para aplicar los exámenes a precios accesibles: 120 pesos cuesta la rápida, de antígenos; 450, la PCR.
Por eso, porque los costos son menores a los que hay en farmacias privadas y laboratorios, donde la prueba rápida llega a los 600 pesos, es que la explanada de Benito Juárez luce así, llena, desbordada, con una fila que serpentea entre los arbustos y se extiende entre las sombras de los árboles y los rayos del sol de las fuentes.
Allí, con el número 423, casi hasta el final de la fila, la señora Carmen Espinal espera su turno. Ha sido un día difícil para ella.
Trabaja en una tienda en el Centro Comercial Santa Fe, es personal de limpieza, pero le dijeron "que no podía laborar así", sin una prueba de covid.
"Me dijeron que me viniera a hacer la prueba del covid. Primero, fui a la delegación Cuajimalpa, pero ahí no hay pruebas, solamente es de martes a domingo; tuve que ir a mi clínica y de la clínica me mandaron para acá, al hospital del Parque de los Venados y del Parque de los Venados me mandaron para acá a la explanada porque las pruebas allá son muy tardadas", platica.
Así, las largas filas son la nueva normalidad en la Ciudad de México, en los arranques de este 2022. El segundo lunes del año comienza así, con filas y filas, que se ven afuera de clínicas, laboratorios, farmacias y hospitales.
Afuera del hospital 1 del IMSS, en la avenida Gabriel Mancera, Ana Laura platica que resultó positiva. Con una caja en la mano, explica que "relativamente, está todo bien, nada más es sintomatología, pasas al médico te revisan y determinan si es más con tratamiento o no y nada más -dice abriendo la caja- te dan dos cajas de paracetamol y unos cubrebocas". Y añade: "a veces, hay a quien le dan oxímetro".
Pero no todos los que están formados en esas largas filas están contagiados o tienen síntomas.
Es el caso de Alfredo, un joven de 17 años, que explicó que acudió a una farmacia a obtener la prueba sólo "para que los que entremos a entrenar tengamos la certeza de que estamos sanos y no haya más contagios". Él practica waterpolo.
Así, la nueva ola de contagios de covid-19 en la ciudad no tiene a los hospitales saturados ni con desabasto de tanques de oxígeno, como lo vimos en las olas pasadas, pero sí con filas y filas de gente que busca hacerse pruebas por los síntomas, ligeros, eso sí, que han presentado después de las fiestas decembrinas.
"Claro que es por la Navidad. No te cuidas o te confías; en lo personal, yo me confié y terminas por descuidarte y te contagias de cierta forma, estás en tu casa, llegan tus familiares, no usas cubrebocas, no tienes las medidas sanitarias correctas y es parte de que te contagies", reconoce Rubén, otro joven que espera en la fila de una farmacia de la colonia Narvarte.
AMP