Los diputados de la llamada cuarta transformación y del bloque opositor confrontaron sus posiciones al abrir los diálogos nacionales para el debate de las reformas constitucionales propuestas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en tanto la bancada de Movimiento Ciudadano anunció que no participará en los foros ni se prestará a la simulación.
“Movimiento Ciudadano no va a participar en los diálogos de la simulación; si tienen verdadero interés en aprobar la agenda de derechos sociales, aquí estamos para discutir y votar; si quieren hacer un show para sacar raja política, para confrontar más a la sociedad y hacer propaganda electoral con los programas sociales, no cuentan con nosotros”, puntualizó Braulio López, coordinador de la bancada naranja.
En respuesta, el legislador Gerardo Fernández Noroña, llamó a discutir con seriedad el paquete de veinte iniciativas presentadas por el Ejecutivo el pasado 5 de febrero, y remarcó: "para show, el de (Jorge) Álvarez Máynez alcoholizándose en el estadio".
En ese contexto, el presidente de la Junta de Coordinación Política y líder parlamentario del PAN, Jorge Romero, convocó a mantener el diálogo, sin que ello signifique conceder ante las propuestas de López Obrador.
“Podemos tener todas las diferencias, todas las del planeta, nada más que yo creo que estamos entrando a un terreno peligroso cuando lo que ya demeritamos es el diálogo. El diálogo es lo que no podemos demeritar, es más, para quienes somos legisladores o legisladoras, nos pagan para dialogar, pobre país, ya no digamos parlamentos si no lo que estamos denostando es el diálogo”, remarcó.
En su turno, el coordinador Morena en el Palacio de San Lázaro, Ignacio Mier, rechazó que la deliberación en cuatro diálogos nacionales, cinco foros regionales y 32 fotos estatales represente un simulacro.
“Simulacro y disimulo es encerrarse en un cubículo con la dirigencia y ver qué es lo que nos conviene electoralmente hacer y qué no hacer y construir a partir de lo que parecería una confección sustantiva; el parlamento es el espacio para parlar, para hablar, no para esconderse”, dijo.
El jefe de la bancada priista, Rubén Moreira, reafirmó la disposición de su partido a debatir cualquier tema, por considerar que el ejercicio representa la oportunidad de poner sobre la mesa la agenda de interés para los mexicanos.
Cuestionó, sin embargo, la coyuntura electoral en que se presentan las iniciativas presidenciales, en el ocaso del mandato de López Obrador:
“Nos llama la atención que es justo cuando está un proceso electoral en el cual la población debe de estar observando las diversas alternativas políticas, que se introduce una narrativa política dentro de un proceso electoral.
De acuerdo con el cronograma aprobado por la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, el primer diálogo nacional sobre “Reformas constitucionales para la libertad será el 27 de febrero, en el Senado de la República, y el segundo, denominado “Reformas constitucionales para el bienestar”, el 12 de marzo en el Palacio de San Lázaro.
El tercer diálogo nacional está previsto para el 19 de marzo en la Cámara de Senadores, con el tema “Reformas constitucionales en materia de justicia, y el cuarto para el 9 de abril en la Cámara de Diputado, con el debate sobre “Reformas constitucionales para la democracia”.
Con respecto a los foros regionales se programaron el Diálogo por la Libertad y el Bienestar, el 29 de febrero, en Durango; el Diálogo por la Justicia y la Democracia, el 7 de marzo, en San Luis Potosí, y el Diálogo por la Justicia y la Democracia, el 14 de marzo, en Puebla.
Asimismo, el Diálogo por la Libertad Comunidades Indígenas, el 4 de abril, en Mérida, y Diálogo por el Bienestar y Justicia, el 11 de abril, en Toluca.
LG