De acuerdo a la autoridad oficial, en León existen al menos 113 asentamientos irregulares, de los cuales, 25 están en proceso de regularización para que puedan adquirir servicios básicos, como la energía eléctrica, agua potable y drenaje.
Juan Arturo Elizondo, director del Instituto Municipal de la Vivienda, explicó que no sólo se trata de que los ciudadanos tengan una escritura pública, sino de que también cuenten con los servicios básicos, lo cual puede dignificarlos y otorgarles mejor calidad de vida,a ellos y sus familias.
“Asentamientos como tal son 113; 25 alrededor en proceso de regularización. Les falta... son dos temas fundamentales: el primero de ellos es que tengan factibilidad de introducción de servicios; la regularización no sólo es el que tú recibas una escritura pública”, comentó.
Explicó que la autoridad no va a regularizar un fraccionamiento que no está habitando por gente, porque lo único que hace es “engordar el caldo” al fraccionador irregular, por lo cual se da prioridad a los espacios donde hay asentamientos humanos.
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Dijo que de ahí se desprende la separación en cuanto a fraccionamientos irregulares y los asentamientos humanos, pues se puede ver una clara diferencia.
“Tienes asentamientos en las Joyas, tienes asentamientos en San Juan de Abajo, tienes asentamientos en Medina, tienes asentamientos en Los Castillos por mencionarte cuatro de las que tienen una problemática aguda en este tema”, agregó.
Aseguró que es complicado conocer el total de las familias se encuentran viviendo en estos asentamientos irregulares. No obstante, en lo que refiere a las Joyas, aproximadamente se trata de unas 12 mil personas.
Añadió que hay mucho trabajo por hacer, sobre todo porque ha habido mucha migración a León desde otras partes del país. Por ello, el IMUVI actualmente está diseñando un programa de vivienda que se pondrá en marcha en el primer trimestre del próximo año, el cual va dirigido a un segmento de la sociedad muy específico.
Por ejemplo, dijo que hay personas que tienen la posibilidad de adquirir un terreno o casa porque cuentan con el recurso, sin la necesidad de un financiamiento o porque su perfil lo permite. Pero también hay un cúmulo de personas que no tienen esas oportunidades, por lo que buscan otorgar flexibilidad a aquellas que, por ejemplo, no pueden comprar una propiedad por su edad.
ALOL