La zona metropolitana de Puebla registra una calidad de aire no satisfactoria este sábado 16 de marzo ante la acumulación de ceniza arrojada por el volcán Popocatépetl en las últimas horas; además, se atienden a un total de 73 personas con síntomas de rinitis.
De acuerdo con información del gobierno de Puebla se registra una acumulación de partículas PM 10 en la capital del estado y en municipios conurbados.
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A la par, los municipios de Atlixco, en el inicio de la Sierra Mixteca; así como San Martín Texmelucan, en la zona de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl; y Tehuacán, al sur del estado, continuaron con calidad de aire regular.
“Los municipios que tuvieron caída de ceniza fueron Huejotzingo, San Lorenzo Chiautzingo, Puebla capital, San Pedro y San Andrés Cholula, San Martín Texmelucan, Cuautlancingo y Amozoc”, informó la autoridad estatal.
El reporte agrega que, en las últimas 24 horas, cuatro personas más fueron atendidas con síntomas de rinitis alérgica, por lo que sumaron un total de 73 habitantes en la entidad que han acudido a uno de los 84 centros de salud ubicados en los alrededores del volcán por molestias ocasionadas por la ceniza.
Ante la actividad del volcán Popocatépetl, el gobierno de Puebla mantiene el llamado a la población a usar gafas, cubrebocas e indumentaria de manga larga para mantener la piel mayormente cubierta, además de evitar actividades al aire libre.
El Cenapred dio a conocer que la actividad registrada por el Popocatépetl se encuentra dentro de los parámetros de la Alerta Amarillo Fase 2. Los escenarios previstos para esta fase, de acuerdo con los especialistas del organismo científico, contemplan que continúe la actividad explosiva de escala baja a intermedia, lluvias de ceniza leves a moderadas en poblaciones cercanas, posibilidad de flujos piroclásticos y flujos de lodo de corto alcance.
El organismo exhortó a la población a no acercarse al volcán y sobre todo al cráter, por el peligro que implica la caída de fragmentos balísticos; mientras que, en caso de lluvias fuertes, recomienda alejarse de los fondos de barrancas por el peligro de flujos de lodo y escombro.
AAC