A cuatro años de que, mediante el operativo 'Golpe de Timón' se logró la captura de José Antonio Yépez 'El Marro', quien lideraba el Cártel Santa Rosa de Lima, las cifras indican que los delitos como homicidio doloso hay una disminución del 26 por ciento y una baja del 52 por ciento en los secuestros, así como del 14 por ciento en el robo a transporte.
Existen otros como la extorsión, cuyas denuncias se han disparado en un 4,711 por ciento o el narcomenudeo en un 33 por ciento, así como la extracción de combustible o huachicoleo, que creció el último año un 67 por ciento.
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Ello sería un reflejo de que la captura del líder criminal más buscado en Guanajuato no pacificó completamente a la entidad tal como se esperaba, si no que generó que el cártel se debilitara, pero diversificara sus actividades para obtener financiamiento, comenzando a afectar de manera mucho más directa a la población.
Para el analista en seguridad David Saucedo, la captura de José Antonio Yépez y posteriormente de otros líderes, generó un reacomodo en la pirámide jerárquica del cártel, donde asumieron el mando jefes de plaza con una visión más sanguinaria, a los cuales se les atribuyen varias de las masacres que ha vivido recientemente la entidad.
"La captura del Marro no sólo no redujo la violencia si no que la incrementó, la incrementó debido a que el gobierno estatal y el gobierno federal capturaron a las tres primeras líneas de la línea del cartel, al Marro y a sus segundos, los liderazgos del Cártel Santa Rosa de Lima que estaban en el origen del cartel eran liderazgos de equilibrio y que tenían mayor perspectiva social y política, se preocuparon por generar una base social de apoyos y generar alianzas con los gobiernos municipales de la región, eran criminales con perspectiva amplia de lo que tenían que hacer para mantener un cacicazgo criminal, pero cuando son detenidos o asesinados, el mando pasa a los jefes de plaza y jefes de sicarios que son carniceros, son personas que no tienen reparo en enfrentar a la autoridad", explicó.
Otro efecto fue la llegada de otros cárteles a Guanajuato, generando una alianza delictiva entre el CSRL (Marros) y el Cártel del Golfo, facción 'Los Escorpiones', entre otros, para apoyarlos en su pugna con el cártel del estado vecino por controlar el territorio y la plaza para venta de estupefacientes.
"El cartel de Sinaloa y el cartel del golfo, los grupos michoacanos como carteles unidos empezaron a respaldar de manera más decidida al Cártel de Santa Rosa de Lima, células del Mayo Zambada y de los Chapitos llegaron a Guanajuato para evitar que el cartel Jalisco Nueva Generación derrotara al cartel de Santa Rosa de Lima", agregó.
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Sobre las cifras, José Antonio Yépez fue detenido la madrugada del 2 de agosto en la comunidad de Franco de Tavera al interior de una de sus casas conocida como 'La Gallera', donde tenía secuestrada a una empresaria de Apaseo el Alto. Al cierre de 2020 Guanajuato registró 3 mil 359 homicidios dolosos y al cierre de 2023 se reportaron 2 mil 581, es decir un 24 por ciento menos.
En cuanto a secuestros, se pasó de 14 en 2020 a 6 al cierre del 2023, lo cual representa disminución del 52 por ciento, mientras que el robo de vehículos pasó de 4 mil 285 en el 2020 a 3 mil 708 al cierre de 2023, una baja de 14 por ciento.
En contra parte, las denuncias por extorsión pasaron de 17 al cierre de 2020 a 801 en 2023, lo cual representa un incremento del 4,711 por ciento y en el delito de narcomenudeo se pasó de 14 mil 932 carpetas de investigación a 19 mil 876, lo cual representa un alza del 33 por ciento.
Ello coincide con la dinámica social donde en los municipios de la zona Laja-Bajío tras la detención de 'El Marro' los comerciantes y empresarios empezaron a ser objeto de extorsión y cobro de piso.