Sin casa ni negocio, por deslave en obra contigua e irregular

Alcaldía Benito Juárez. Andrés Guzmán fue víctima colateral de un proyecto de la empresa inmobiliaria Desproco.

El conflicto inició el año pasado. (Especial)
Cinthya Stettin
Ciudad de México /

En enero de 2018 la constructora identificada como Desproco SAPI de CV, propiedad de Guillermo Pulido Suárez y Guillermo Pulido Alba, inició la demolición de una casa ubicada en Eje 7 Sur Extremadura número 196, colonia Insurgentes Mixcoac, para edificar 12 departamentos en siete pisos; sin embargo, un deslave en las obras provocó afectaciones en el predio contiguo con número 198.

Dos meses después, Andrés Guzmán Castillo se percató de que la cimentación de su inmueble, que albergaba su casa y restaurante, sufrió afectaciones a consecuencia de las excavaciones que realizó la desarrolladora.

Incluso, para evitar el derrumbe del inmueble afectado los trabajadores apuntalaron con polines la estructura.

Por lo anterior, Andrés tuvo que abandonar su hogar y fuente de empleo, así como despedir a 15 trabajadores.

Entre mayo y junio del año pasado, el entonces delegado de Benito Juárez, Ángel Luna Pacheco, colocó sellos de suspensión a la obra; sin embargo, la inmobiliaria no respondió por los daños.

El afectado tuvo que emprender acciones legales pero su sorpresa fue mayor cuando autoridades delegacionales le informaron que la desarrolladora ni siquiera contaba con permisos de Protección Civil.

“Lo más difícil es que no tengo ingresos, a mí literalmente me sacó de mi propiedad, perdí mi restaurante y vivo en una zozobra”, señaló Guzmán Castillo.

La obra carecía de programa de mitigación de riesgos y documentos que avalarán la identificación de colindancias previo a la construcción.

MILENIO solicitó una entrevista con los dueños de la constructora Desproco, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta.

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OTRA ACUSACIÓN

Otro caso parecido al del inmueble de Eje 7 Sur Extremadura número 196 es el de José Díaz, quien contrató a Desproco para edificar su casa en la colonia Insurgentes San Borja; para hacerlo la constructora utilizó documentos falsos, incluso para entregarle los papeles de liberación de obra le solicitaron 650 mil pesos.

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