A seis días del ingreso al Hospital de Nutrición, Enrique García y su familia continúan a la espera de que sea entubado con la esperanza de encontrar una cama con ventilador por lo que su traslado ha sido pospuesto en varias ocasiones.
Hasta el momento sólo una llamada de menos de cuatro minutos a Marta Chávez, cuñada de Enrique, es la única información que tiene la familia sobre el estado de salud del hombre de 55 años quien sufre de los efectos del coronavirus y se mantiene a la espera de que algún hospital otorgue el material necesario para estabilizar su saturación de oxígeno.
“Me llamaron al mediodía diciéndome que mi paciente no ha tenido un mayor cambio que ellos evidentemente, como no hay una cura propia del covid-19, solo está con cosas como anticoagulantes para ayudar a desinflamar los pulmones, los mismos no han desinflamado. Aún me lo reportan grave y que aún seguimos en la lista de espera para qué nos hable el centro de traslados… Lo que me comenta la doctora es que estaba tranquilo que no tenía dolores y que eso es bueno, porque quiere decir que todavía no empiezan a deteriorarse los demás órganos” explicó a MILENIO Marta Chávez, quien ha tenido que hacerse cargo, pues su hermana, la esposa de Enrique, también fue contagiada.
Chávez reveló que la llamada fue cordial, pero que se le enfatizó que él requiere ser intubado y que dependen de encontrar una cama disponible en algún otro hospital.
El protocolo de los hospitales para pacientes con covid-19 es una llamada al día para notificar el estado de los pacientes, hecho que causa aún más angustia para los que esperan.
“Para que comiencen hacer los traslados y los trámites te hablan y tienes que venir en este momento o estar aquí afuera en el hospital para poder trasladarte con tu paciente en la ambulancia. O sea, uno como acompañante debe de ir dentro de la ambulancia con el enfermo, para poder hacer los trámites a la siguiente institución”, explicó Chávez.
Marta explicó que mientras espera a que el proceso de su cuñado avance, tuvo que llevar a su hermana Diana a la clínica de Tlalpan para extender su incapacidad.
“A veces me pregunto por qué un paciente que está enfermo de covid-19 tiene que salir de su hogar para pedir más incapacidades. Es evidente que siempre se corre un riesgo de contagio, no sólo para nosotros que lo llevamos, sino para algunas personas dentro del hospital”, finalizó Martha.
ledz