El delegado estatal de la Gran Alianza de Industriales de la Masa y la Tortilla de la República Mexicana, Nemesio Figueroa Rojas, apuntó que hasta el momento algunos tortilleros han mantenido el precio entre 12 y 13 pesos; sin embargo, con el precio máximo que ha marcado la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en 15.60 pesos, prácticamente está orillando o alentando al sector a emparejar el costo.
“El problema es para la población de escasos recursos que lo único que tiene es para tortillas y huevo o frijoles, lo idea es que el mercado se regule solo, especialmente porque el precio de nuestro producto quedó liberado por el decreto el 30 de septiembre de 1998 y entró en vigor el 1 de enero de 1999”.
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Las demandas del Consejo Rector de la Tortilla Tradicional en Nezahualcóyotl, expresó, son válidas, pero las condiciones de cada región del país, incluidos los dos valles en el Estado de México, son diferentes como el caso de Tijuana donde el kilo cuesta más de 20 pesos porque el estilo de la vida es mucho más caro.
El precio que el consejo considere rentable, añadió, está bien, pues lo único que están buscando es abasto de maíz para poder trabajar y una vez que lo tengan el precio se fijará en el mercado. Ellos quieren seguir haciendo tortilla con maíz tradicional a diferencia de otros estados como Chiapas, donde el producto está harinizado; sin embargo, si no hay maíz lo único que deben hacer es adaptarse a las condiciones.
“En el Seminario no es lo mismo que en el centro de Toluca o Metepec, las tortillas en cada zona tendrán un precio porque las condiciones de producción no son las mismas, hay quien tiene local y no paga renta, hay quien tiene dos hijos que le ayudan y no paga empleados. Quien pague por todo, cobre caro y tiene quien le compre en más de 15 pesos, también está en su derecho”.
El principal problema en estos momentos, dijo, es el cambio de ciclo, es decir, se está terminando el maíz que se cosechó a finales del año pasado, aunque ya viene la cosecha de primavera-verano, por el momento hay un desajuste que podría durar entre 15 días y un mes.
Pese a lo que digan las autoridades, subrayó, el precio de garantía del maíz blanco no está en 4 mil 150 pesos por tonelada, el presidente de la República lo fijó en 5 mil 610 más 150 pesos de flete, oscila en 5 mil 760 pesos; “ese precio es para que el productor no ponga la tonelada por debajo, pero en el mercado el maíz ya anda en 6 mil 300 o 6 mil 500 pesos, dependiendo su calidad”.
Si bien algunos consorcios como Grupo Industrial Maseca, en el sector de harina nixtamalizada, demostró que no ha subido ni tiene intenciones de subir el costo, ni en el corto ni en el mediano plazo, el resto de las grandes empresas deben solidarizarse y hacer lo mismo, dijo.
“Por ello los industriales de la Masa y la Tortilla en el Valle de Toluca no van a rebasar los 16 pesos, como lo hemos venido expresando”.
MMCF