La embajada de Japón en México otorgó un donativo de 150 mil francos suizos, alrededor de 2.9 millones de pesos, al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para apoyar en labores de asistencia humanitaria y médica a migrantes centroamericanos, principalmente en los estados del norte y del sur del país.
El dinero aportado por la embajada será repartido entre las diversas delegaciones de la Cruz Roja de la región, incluida de la de México, con lo que buscan garantizar la atención médica a los migrantes, así como ofrecer información del apoyo que ofrecen las filiales de la organización en Centroamérica.
El embajador de Japón en México, Yasushi Takase, aseguró que se busca promover la región de Centroamérica y coincide en que "para hacer frente a la migración es indispensable abordar los problemas de la pobreza y la desigualdad que están en el origen de los desplazamientos; al mismo tiempo es una tarea importante y urgente brindar asistencia desde una perspectiva humanitaria a los migrantes que ya ingresaron a México".
Afirmó que el CICR "cuenta una vasta experiencia en la materia, respaldada por décadas de trabajo".
Aseguró que el gobierno de Japón "seguirá brindando apoyo tanto para el desarrollo centroamericano como para mejorar las condiciones de vida de los migrantes, basándose en el concepto de seguridad humana".
Jordi Raich, jefe de la Delegación Regional del CICR para México y América Central, agradeció el aporte de la embajada.
Ofreció condolencias al gobierno japonés por las afectaciones tras el paso del tifón Hagibis.
Raich enfatizó que la Cruz Roja "ni promueve ni previene la migración" y que la principal función que se tiene es evitar que los migrantes "desaparezcan, que sean extorsionados, que caigan en cerros, que las familias se separen, mueran de sed o de hambre".
El director de la Cruz Roja Mexicana, Fernando Suinaga, aseguró que la función del CICR es coordinar los programas para toda la región, mientras que la delegación mexicana sólo se encarga de acompañar las labores médicas para los migrantes y el apoyo a los albergues con agua, cobertores y llamadas telefónicas a familiares.
Aclaró que los fondos no irán completamente a la Cruz Roja Mexicana, sino para los comités de la región en Centroamérica.
Martinius de Boer, jefe adjunto de la Delegación Regional, aseveró que la Cruz Roja trabaja con distintos sectores del gobierno mexicano, en que destacan la elementos federales, fiscalías especializadas, la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Secretaría de Salud, e incluso con albergues operados por iglesias y ONGs.
Así como elementos de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos ya que es un proyecto transnacional, esto para prevenir la disipación de familias migrantes.
De acuerdo con el CICR en el Informe Anual México 2019, se atendieron en 2018 a 26 mil migrantes en salud por parte de la Cruz Roja Mexicana y de los ochos puntos de asistencia del Comité Internacional, entre ellas a 56 personas que recibieron atención médica por amputaciones.
Asimismo, más de 18 mil 500 migrantes se beneficiaron de apoyos en albergues alrededor de la República, en donde también emiten recomendaciones para quienes realicen el viaje hacia Estados Unidos a través de la difusión de folletos y envío de recomendaciones por WhatsApp.
dmr