Desde hace un año comenzaron los preparativos para los XV años de Jacqueline, una joven salmantina que se vio en la necesidad de adaptar su fiesta en medio de una pandemia.
Con sana distancia y usando cubrebocas en todo momento, es así como continúa con los ensayos, en espera del día de su evento social, el cual se tiene programado para el 26 de septiembre.
“Me entran de repente nervios porque esto de mi fiesta se lleve en medio de una pandemia. Me puse muy triste porque pensé que ya no se iba hacer nada y como varias quinceañeras de mis compañeras sí se cancelaron, yo pensé que la mía no se iba hacer”, platicó Jacqueline.
Consciente de que su festejo se realizará de una manera distinta, con menos invitados y una temática poco común, pues será con toques muy mexicanos, Jacqueline espera con ansias su fiesta de cumpleaños.
“La fiesta está como yo la soñé porque yo quería una fiesta mexicana, uería tener un vestido bordado y hasta cierto punto creo que si me la estaban haciendo, tal cual, excepto que yo no tenía planeado con todo esto que está pasando, yo pienso que la voy a disfrutar mucho”, platicó.
No todo ha sido color de rosa, otra de las complicaciones a las que se ha enfrentado la familia López fue el presupuesto, si bien los gastos se habían calculado con tiempo, el dinero comenzó a faltar recién inició la pandemia.
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“Disminuyeron nuestros ingresos, habíamos contratado el salón desde el año pasado en un paquete, cuando comenzó la pandemia, hablé con la chica del salón, le dije que por el trabajo se nos había complicado el paquete que teníamos contratado, me dejó el salón y me contactó con otra chica para organizar el evento a un precio más económico”, relató Claudia, mamá de la futura quinceañera.
La organización del evento sigue en pie, pero con una serie de adecuaciones.
“Primero la reducción de personas, me comentaba la chica del salón que si el salón es para 300 personas, hay que reducirlo a la mitad, para llevar a cabo los protocolos de salud. Va ver tapetes desinfectantes, gel, cubrebocas, tenemos que obedecer”, explicó.
El evento tendrá una duración de 5 horas y para servir los alimentos, se colocarán cazuelas en cada pesa con 5 guisados y serán sustituidos cuando sea necesario, para evitar aglomeraciones.
“La pandemia nos ha dejado las ganas de volver a ver a la familia, saber que estamos y podemos vernos y tener un recuerdo de la familia. Mis amigos me dijeron que están dispuestos a disfrutar, pero hay algunos que si me dicen que sus papás, que las medidas, que están espantados”, concluyeron mamá e hija.