El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Héctor Vasconcelos, afirma que el país atraviesa su peor crisis con Estados Unidos de la era moderna, con un tratado comercial no ratificado todavía y porque la migración no va a desaparecer, por lo que ahora habrá que administrar ese tema lo mejor posible.
Dijo que haber abierto las fronteras a los centroamericanos rebasó a este gobierno, por lo que es adecuado el tratamiento que se le dio con el control de las fronteras a cargo la Guardia Nacional, porque ya no era posible atenderlos en las ciudades fronterizas donde los albergues resultaron insuficientes.
En entrevista, el legislador de Morena hace un balance de un año de trabajos en el Senado, como presidente de la principal comisión que revisa la política exterior del país.
Confirmó que hay preocupación en la bancada porque este gobierno no sale a exponer sus logros en el extranjero y, en su opinión, el presidente Andrés Manuel López Obrador debió acudir al foro del G-20, pues aunque forma parte de su estrategia de resolver primero los problemas internos, pudo haber sido su debut como líder en la escena mundial, “aunque yo no descarto que asista a ciertas reuniones en el mediano plazo”.
--¿En qué situación está la relación con Estados Unidos, usted decía que es la peor crisis"
"Sí, de las últimas décadas. Yo sí pienso que al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador le ha tocado la época más difícil en la época moderna de México".
-- ¿Por qué?
"Por un lado hemos tenido todo el problema migratorio que además es un problema que no va a desaparecer, porque continuará en mayor o menor medida el flujo de gente que busca la vida, hacerse de una mejor vida en Estados Unidos y mientras persista la miseria, la falta de oportunidades, la violencia en Centroamérica seguirá habiendo estos eventos y lo único que podemos hacer es realmente administrarlos de la mejor manera posible, pero no van a desaparecer".
De acuerdo al también ex embajador, aunque se hable de que la Guardia Nacional frenó las caravanas, es la mejor estrategia posible porque sí se respetan sus derechos humanos.
--¿No cree que el presidente se equivocó al abrir la frontera e ilusionar a los centroamericanos a venir a México y ahora se les limita con la Guardia Nacional?
" Yo creo que lo que sucedió es que la intención del nuevo gobierno fue acoger de la mejor manera posible a los centroamericanos, ofrecerles mejores condiciones, pero nunca imaginamos nadie, ni el gobierno mexicano ni el norteamericano, no sé si los centroamericanos el monto, la cantidad de gente que iba venir".
--¿Los rebasó el problema?
"Sí nos rebasó a todos. Si comparamos lo que eran las caravanas migrantes de octubre o noviembre andaba por el orden de los 60 mil o 70 mil personas, pero para mayo tenemos ya 144 mil y entonces un desbordamiento de la cantidad que vino, eso naturalmente cambia las condiciones".
Consideró que la llegada masiva de migrantes llevó a tomar medidas como las anunciadas hace dos meses, con las que se logró poner orden y regresar a su país a quienes tenían conductas antisociales, por ejemplo.
Reconoció que las propias ciudades fronterizas no tuvieron ya la capacidad para operar albergues, porque resultaron insuficientes y ahora deberán operar centros de atención con miles de pesos en recursos que deberá pagar el gobierno para atender a esos migrantes que se estacionaron ahí.
Héctor Vasconcelos señaló que además de la migración, la relación con Estados Unidos se agravó por la ratificación del tratado comercial (TMEC) que el congreso norteamericano no ha suscrito y que en el peor escenario se podría ir hasta las elecciones del próximo año.
"Yo creo que eventualmente el congreso norteamericano va a aprobar el tratado, pero es evidente que no sabemos exactamente cuándo. En el mejor de los casos podría ser entre septiembre y noviembre de este año, pero en el peor de los escenarios podría esto a largarse a lo largo de toda la campaña electoral en Estados Unidos el año próximo".
Sobre los crímenes de odio que provocaron en Texas la semana pasada el tiroteo contra mexicanos, el legislador alertó que la xenofobia es un problema que ha enraizado en una parte de la población estadounidense, porque el carácter idiosincrático del actual gobierno, que no se ha regido por las normas tradicionales de la diplomacia y los intercambios comerciales, ha dificultado las cosas.
"Son crímenes de odio, porque cuando uno azuza el sentimiento anti inmigrante pues no es raro que ocurren estas cosas. Hay un caldo de cultivo que se ha generado en años recientes en Estados Unidos y es sumamente grave porque puedes llevar a estas cosas o peores".
"Si el clima anti inmigrante continúa en Estados Unidos, no hay modo de que desaparezca y, como el problema de las migraciones que tenemos que enfrentar, no lo podemos extirpar de la realidad de la agenda y de la relación bilateral".
--Hay la versión de que a los mismos senadores de Morena les preocupa que este gobierno no salga a cacarear sus logros en el extranjero y que ex funcionarios lo aprovechen para hablar mal de México en el extranjero ¿qué piensa?
"Yo personalmente si hubiera preferido que el jefe del Estado Mexicano acudiera a estas reuniones, como la del G20 o la Alianza del Pacífico, porque a mí sí me parece muy importante la presencia al más alto nivel de México, cuando menos en algunos de estos eventos".
Sin embargo, señala que el argumento presidencial para no acudir es que otros gobiernos abusaron de dichos encuentros internacionales para quedar como candil y oscuridad de la casa.
"Entonces, por ejemplo, el presidente Peña Nieto no faltaba a reunión alguna, quizá porque eso le permitía distraerse de los problemas que había aquí; allá era bien recibido".
--¿No quería ver los problemas de corrupción..?
"Sí, no podía salir, ni siquiera podía tener una conferencia de prensa diaria, entonces hubo una reacción de decir: vamos a centrarnos a resolver todos los problemas internos primero y luego ya paulatinamente iremos saliendo al mundo".
"Ésa es una estrategia que a mí me explicó muy bien el presidente López Obrador desde hace muchos años, de que decía mira no es que no tenga algo importante que atender en la invitación, pero es más importante que primero trate yo con los problemas internos y después en la medida en que vayamos resolviendo la situación interna iremos teniendo una presencia mayor en el extranjero".
--¿Usted cree que ya debería tomar esa decisión?
"A mí me hubiera gustado que asistiera a la reunión del G20, porque es el momento en que se reúnen los líderes más importantes del mundo y hubiera sido su debut en ese foro al más alto nivel que hay, pero va a ocurrir esto".
--¿Es estrategia o error?
"Como dice el presidente: siempre hay que jerarquizar y abordar los problemas internos y luego la vinculación de México con el extranjero. Pues es una estrategia que yo espero que tenga mucho éxito".